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LUDMILA TCHERINA Una belleza de fama
universal
UNA de las cinco mujeres más
hermosas del mundo, Ludmila Tcherina, notable
bailarina francesa, se encuentra ahora en
Hollywood, agregando así un nuevo lauro en su
famosa carrera, que ha incluido papeles de
importancia en tres diferentes idiomas, así como
en su carácter de artista de ballet. Habiendo
firmado contrato para filmar dos películas por
año en la Universal, Ludmila regresó
recientemente de su hogar en París, para hacer
su debut con Jeff Chandler, Jack Palance y Rita
Gam, en la producción "El signo del Pagano".
Su brillante trabajo en "Los cuentos de
Hoffman", como la seductora que enloqueció a
Hoffman en el episodio veneciano, estimuló el
interés que había despertado en la Universal.
Después de volar a Hollywood, hizo allí una
prueba con Jeff Chandler, que inmediatamente la
preconizó corno una de las más hermosas y
talentosas figuras descubiertas últimamente.
Este vaticinio se vió plenamente confirmado con
su labor en "El signo del Pagano", pese a que su
papel es un sencillo y dramático bosquejo de la
vida de la princesa da Constantinopla.
Ludmila Tcherina nació en París un 10 de
octubre, siendo su padre inventor de
descendencia rusa, y su madre, una parisiense.
Hija única, Ludmila empezó su educación en San
Vicente de Paúl, demostrando una natural aptitud
para el baile, cuando tenía 7 años. Hizo su
primera aparición en el teatro profesional a la
edad de 11 años, y desde entonces ha venido
actuando en ballet, teatros y cámaras
cinematográficas y ante los mayores soberanos
europeos. Su debut ante las cámaras tuvo
lugar a los 21 años, cuando apareció con Louis
Jouvet en "Le Revenant". Su papel en "El signo
del Pagano" marca su décima asignación en una
secuela que incluye películas francesas,
italianas, españolas e inglesas. Ganó el
equivalente del "Oscar" hollywoodense en Francia
en una película de corto metraje titulada "A la
memoria del héroe", en la que apareció bailando
ante Napoleón. La primera vez que habló
inglés en la pantalla fué en "Zapatillas rojas".
No entendía una palabra de lo que decía y
memorizaba su diálogo fonéticamente, repitiendo
este método también para su segundo papel en
inglés en "Los cuentos de Hoffman". Actualmente
habla inglés bastante bien, pero está estudiando
para mejorar su acento. Ludmila Tcherina se
propone regresar a Europa tan pronto como
termine su actual compromiso en Hollywood, para
concretar un sueño. Pensando que el baile
clásico puede cambiarse con el canto, Ludmila
piensa contratar una compañía de bailarines y
cantantes desconocidos para hacer una gira que
espera incluirá algunas ciudades de América.
También tiene en consideración una oferta del
productor británico Michael Powell, para
protagonizar "Scheherazade", que él hará en
Europa. Es esta una despampanante hermosura,
con largo cabello negro y brillantes ojos
pardos. Mide 1,68 de estatura y no tiene
problemas con la dieta, pues conserva su figura
bailando y haciendo ejercicios. Revista PBT
12.08.1955
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