"A 'Bogie' le gustaba el ruido de la noche y los cafetines
destripados más que los elegantes night clubs. Yendo hacia
ellos, en sus mesas iluminadas por farolitos colorados, o
viniendo de ellos podía encontrarse con la gente que amaba y que
lo amó: a pesar de que en el '37 ya ganaba casi medio millón de
dólares por año, a él le gustaban los conductores de taxis, los
ladrones y las mujeres." Leo Sala, 1970