Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 

Fotos

Jimmy Cliff

JIMMY CLIFF: EL REY DEL SOUL
Estremecerá a Buenos Aires durante las dos últimas semanas de febrero y luego se esfumará con 40 mil dólares en el bolsillo (14 millones de pesos de los viejos): es Jimmy Cliff (23), un showman y compositor jamaicano de ojos melancólicos y ritmo luciferino, que ya el año pasado electrizó a los más exclusivos habitués de Punta del Este, con su 'Cascada', un hit mundial del estilo soul, que arrebató el cetro al viejo jazz. "Soy el tercero en el ranking internacional en venta de discos", se ufanó ante SIETE DIAS; su grabación de Mundo Maravilloso, Hermosa Gente, escolta a Venus, interpretada por un conjunto holandés, y Tamba Mountown, a cargo de un grupo británico. Hace 8 años y medio, cuando apenas era un niño vagabundo, intervino en el Talent Show, un espectáculo teatral similar al programa 'Si lo sabe, cante', que Roberto Galán regentea en Buenos Aires. Sin zapatos, con su mejor ropa remendada, subió a| escenario para cantar: tenía experiencia callejera. Jimmy (foto) no conoció a su madre y ayudaba a sostener el presupuesto de papá Cliff (un oscuro sastre jamaicano) cantando sones folklóricos en el puerto ante turistas norteamericanos. Fueron esas mismas tonadas las que lo catapultaron al éxito: "Primero hice giras por las Antillas; luego fui a Londres y después recorrí el mundo", resume Jimmy, quien ya grabó 7 long plays y 30 discos simples. En enero concurrió al Festival de Cannes organizado por el M.I.D. (Mercado Internacional del Disco) como invitado especial: en años anteriores asistieron Palito Ortega, Roberto Carlos, Barbra Streisand. Cuando abandone Buenos Aires, Ed Sullivan lo espera en su legendario show televisivo neoyorkino, pero Jimmy asegura que "preferiría construir una casa en la Argentina para vivir aquí". Tal vez ello tenga relación con la ausencia de prejuicio racial visible que singulariza a la Argentina: "Durante; mi paso por Miami —memorizó— nunca me negaron abiertamente la entrada a un hotel. Me decían que era muy caro para mí, y cuando me disponía a pagar lo que fuera, agregaban que, en realidad, no había habitación". Pero se apresura a concluir: "Sin opresión a la raza negra no habría soul: hijo de los blues y los spirituals, el ritmo soul es una rebelión del corazón y la sangre contra la infelicidad y la injusticia".
Revista Siete Días Ilustrados
16-02-1970

Fotos

 

 

siguiente en la sección