BASQUET RISUEÑO PERO TECNICAMENTE SUBLIMADO
UNICAMENTE el carácter benéfico de las reuniones del Luna Park —una parte de su recaudación va destinada a la Fundación Eva Perón— puede justificar la confrontación de los basquetbolistas profesionales visitantes con nuestros jugadores aficionados. Es tan grande la diferencia de capacidades y aun de envergadura física —son verdaderas máquinas humanas, esto dicho en el aspecto atlético—, que cualquier equipo sudamericano debe resignarse a cumplir la función de "punching-ball". Sin embargo, no puede mirarse este espectáculo ofrecido por el All Stars y el Harlem Globetrotters con gesto avinagrado. Por el contrario, hay que escribir sobre ello alegremente..., como que el simple recuerdo de lo visto en el Luna Park nos lleva a la sonrisa. ¡Son impagables! Esto lo resume todo. Desde malabarismos de alta escuela hasta la payasada de más alto corte circense. Pero también, desde la más simple jugada a la mejor demostración técnica.
Revista Mundo Deportivo
24.05.1951