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Arriba dice: Olinda Bozan, Paquito
Busto, Leonor Rinaldi, Carlos Morales
Los cuatro ases del teatro de la Comedia, en una caracteriación de "Doña Juana la
Loca", estrenada con motivo del beneficio de Paquito Busto, vistos por Villanueva.
Al Centro dice: Lucía Montalvo, Ibis, Paco Obregón, Inés Murray y Dorita Dormal, de la
revista "Ojo que aplican el Bando", estrenada en el Buenos Aires.
Debajo dice:.El gran caricaturista Fresno, tan interesante en dibujante como en actor
genérico... |
Comoedia
Por el Nacional
Milonga
de Alejandro Berruti en el Teatro Nacional
Samuel Gimenez, Miguel Gomez Bao, Tita Merello, Fina Suarez (Por favor que no se comente
esta Garufa), Mutareli (Usted tiene mas batallas ganadas que Garibaldi) y Tito Lusiardo.
Con "Milonga" ensaya Alejandro E. Berruti un nuevo método de realización
teatral en el orden nacional. No hay en ella el argumento o la intriga que enlace las
incidencias de la pieza, sino que el autor nos presenta tres instantes continuados
desarrollados en determinado ambiente.
Si al influjo irresistible del tango, Milonga siente nacer el amor por un hombre, el mismo
influjo la impele caprichosametne hacia otra ser y en la búsqueda de nuevas emociones, la
fugacidad de su impresión será la esencia del voluble sentimiento que se inspira, nace y
muere en cada tango. Tal es en síntesis la obra.
La pintura del estado de ánimo de sus personaejs, poseídos de la pasión sensual y
mórbida del tango, que une sin reflexión y enreda las almas en el espejismo sutil de
engañosa felicidad llevándolos al disfrute de otros placeres complementarios -la bebida
y el juego- hasta que el sol del día les trae invariablemente una sana esperanza de
regeneración, la presentación de ambiente, la sugerencia de imprecisos sentimientos
característicos del medio, los acertados rasos psicológicos de la heroína que su nombre
a la obra, el diálogo pulcro y medido, algunas situaciones bien halladas y el cuadro casi
plástico con que se cierra el segundo momento, son méritos nada despreciables que se
exhiben en "Milonga".
Empero, alguna escena cursi -como la del asaltante redimido y la exuberancia en los trazos
caricaturescos de otros personajes- restan valor a la producción que se señala como
honesta pero propendiente al halago del chabacano gusto público.
La interpretación tuvo la virtud de la uniformidad. Tita Merello, muy en tipo, imprimió
al personaje central eficacia persuasiva, desenvoltura y animación. Mutarelli se condujo
graciosamente aunque no dió a su papel de criado andaluz el lenguaje necesario para
su personificación; fue excelente el desempeño de los demás. |
