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La Historia del Hospital Argerich
Roberto Litvachkes
robertolit1@yahoo.com.ar

Lunes 24 de Noviembre del 2003
Diario Clarín

" Seguramente, ningún inmigrante italiano del puñado que fundó en 1897 la Unidad Sanitaria de La Boca haya imaginado que alguna vez un presidente de la Nación la usaría como sanatorio de cabecera. Un siglo y seis años después, aquella salita de barrio se convirtió en el Argerich, el hospital público de mayor complejidad del país y uno de los mejores de Latinoamérica. Ahora tambn va a ser el sello sanitario de la gestión K: el presidente Néstor Kirchner lo eligió para atenderse, en caso de necesitarlo, hasta que termine su gestión en 2007..."

Podríamos agregar que muchas cosas han pasado en estos aproximadamente 400 años desde las primeras preocupaciones de los vecinos cuando la Ciudad no contaba aún con 1000 habitantes hasta la decisión de convertir al Argerich en el Hospital responsable de la salud del Presidente.
De esto trata este libro: rescatar los inicios del Hospital Argerich, contar cómo se vivía y cómo se cuidaba la salud de los vecinos en las épocas en que el Hospital Vecinal de la Boca comienza a brindar servicios, su inserción comunitaria y su designación como "Hospital Dr. Cosme Argerich", su nueva ubicación y las anécdotas y recuerdos que unen la pequeña salita de la calle Pínzón con el actual edificio de la Avenida Almirante Brown.
Cuando se cotejan los documentos legislativos y municipales con las publicaciones y diarios de la época y cuando se escuchan los testimonios que espontáneamente historiadores amigos, vecinos de la Boca y los médicos nos brindaban, se llega a la conclusión de que el camino que ha recorrido el Hospital no ha sido fácil y hubiera sido imposible sin la valentía y generosidad de lo que podríamos llamar la comunidad hospitalaria.
Desde sus inicios el Argerich tuvo que pelear por su espacio y en muchas ocasiones fue rescatado del peligro por vecinos a veces anónimos y a veces ilustres como Quinquela Martín, por legisladores que podían dudar pero finalmente encontraban la firmeza que sus legislados les exigían, y por los miembros médicos y no médicos del propio hospital que habían tejido una relación de afecto, compromiso y solidaridad con el barrio y con quienes requerían de su auxilio.
En este libro el lector encontrará también anécdotas que hoy le parecerán absurdas y risueñas: curiosidades de cómo se practicaba el arte de curar en una época lejana que quizás despierten en él una sonrisa, pero que seguramente también evocarán recuerdos emotivos de sus mayores y de las creencias y hábitos con que enfrentaban las enfermedades en otros tiempos.
Estamos seguros que se sorprenderá con muchos de los datos y documentos que aquí le presentamos: en muchos casos hemos preferido citarlos en forma textual y con las referencias necesarias para que pueda cotejarlos si quisiera hacerlo. La lectura atenta de los mismos no sólo no lo librarán de la incredulidad sino que quedará atrapado en una historia apasionante: la historia de cómo una comunidad ha enfrentado el sufrimiento, la historia de la Ciencia, la Tecnología y el Conocimiento como armas de médicos, auxiliares y personal del Hospital Argerich, pero también historias de solidaridad, de pasión y muchas veces del sacrificio de la propia vida.
Lo invitamos a disfrutar y recorrer este camino hacia el pasado para compartir la alegría de los cien años del Hospital Argerich.

A modo de rápido avance de nuestro trabajo van estos adelantos de algunos capítulos del libro los cuales iniciamos con una entrevista a su actual Director, el Dr. Nestor Hernández.
Pero, de manera que parecerá paradójica, comenzamos este trabajo de historia tratando de conocer un suceso reciente en el tiempo.
Nos referimos a la decisión del Presidente de la Nación , el Dr. Nestor Kirchner en cual designó al Hospital Argerich para atender su salud y la de su familia. A nuestro entender este no es un dato menor y quienes conforman el Hospital saben que esta responsabilidad es el resultado de una larga trayectoria que trataremos de contar pero que podríamos resumir como ¨cien años de compromiso con la salud".
El Dr. Hernández ejerce en la actualidad el cargo de director Hospital Argerich, en ese momento era el Sub-director y la dirección era ejercida por el Dr. Donato Spacavento, ambos se enteran de la decisión presidencial a través del Dr. Bollomo, médico personal del Presidente, quien les expresa que en función del interés y de la confianza del mismo en la Salud Pública y merced que el grupo de médicos que lo asesoraba le había indicado que en el Hospital Argerich podía encontrar una excelente respuesta a cualquier requerimiento para el cuidado de la salud de los miembros del Poder Ejecutivo decide asignarle esa responsabilidad.
El Dr. Hernández se formó dentro de la órbita de la Salud Pública por lo que la noticia lo llenó de orgullo y considera que el mismo debe ser extensivo a todos los médicos de los Hospitales Públicos, " el Argerich es en este caso es el estandarte y el ejemplo de otros hospitales pues muestra donde se puede llegar en base al esfuerzo, a la capacitación y a la superación personal.
Hoy en el Argerich se realizan trasplantes cardíacos, hepáticos, renales, se hace la cirugía de más alta complejidad en el país, y a la vez cuenta con profesionales que son Profesores Titulares de las Cátedras más prestigiosas por lo que, junto con el Hospital, son referentes nacionales e internacionales y Presidentes de Congresos que reúnen a los médicos más importantes del Mundo. Y obviamente esto es así gracias al esfuerzo de la comunidad médica de este centro en pos de una idea y esta es que el Hospital Público debe ser la Primer Referencia en el Tema de la Salud y donde se encuentren los profesionales mas capacitados a disposición de la población, este es un compromiso que toman todos los médicos de esta institución.
Por eso el slogan que nos representa a todos, a médicos y no médicos del Hospital Argerich, en estos cien años; " comprometidos con la Salud Pública ".
Finalmente se concreta la propuesta presidencial con el acondicionamiento de un sector para que pueda brindar la seguridad que el primer mandatario debe tener, y con la atención similar a la que recibe cualquier ciudadano con la única diferencia de que goza con la mayor flexibilidad para cubrir las distintas alternativas de un tratamiento y la vez con comodidades para permitirle seguir ejerciendo las responsabilidades de su cargo.
En el Argerich siempre fue importante la superación profesional y de servicios y siempre contó con grandes profesores para lograr la mejor capacitación.
El Hospital siempre fue referencia en Cirugía, en Cardiología, en Tocoginecología. La guardia siempre fue reconocida por la cantidad de pacientes que atiende y por la calidad de esa atención.
Es de destacar el cambio que se produce en el Hospital a partir de la década del 60 con la creación de las residencias, esto provoca un mejoramiento extraordinario en la formación médica. La Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad supo apreciar las posibilidades que brindaba esta reorganización y su apoyo permitió el beneficio en la capacitación profesional hospitalaria y por ende en la atención de la población. Y el Argerich siempre fue un Hospital Escuela de excelencia que exigía para ingresar el mayor esfuerzo y los mejores promedios lo que permitió su jerarquización y su permanente superación y lo distinguió con el reconocimiento de los Hospitales de la Argentina.
La actividad del Hospital empieza a tener mayor trascendencia a fines de los 80, ya que a partir de la conformación del área de diálisis comienzan a realizarse los trasplantes renales, allí la labor del hospital toma notoriedad y luego siguen los trasplantes hepáticos y los cardíacos. También el área de cirugía cardiovascular es líder en el área, un servicio de cirugía formada con procedimientos y equipamiento de última generación, el hospital también es centro de referencia en otras áreas médicas entre las cuales se destacan cirugía ileopancreática y diagnósticos y tratamientos hemodinamicos.
A todo esto se suma un completísimo equipamiento de avanzada entre los que se destacan los de tomografía helicoidal, resonancia nuclear magnética, ecógrafos de última generación y cámara gamma.
En el futuro el Hospital Argerich seguramente consolidará su posición como espacio de referencia para Medicina de Alta Complejidad fundamentalmente en las áreas quirúrgicas donde se destaca como Hospital de Avanzada y hará aún mas firme su compromiso con la salud pública de los argentinos"

continúa