Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 

Publicidad antigua

Lettera

...hasta me subí a un árbol (con la Lettera)
-Lo voy a escribir en el árbol- les dije, pero no tenía con què (... o sí, tenía, pero no me había dado cuenta; ya vas a ver). Y se me quedaron mirando, poniéndome cara de "A ver cómo te arreglás...".
Por un momento no supe qué hacer, pero de pronto me acordé de la Lettera y pensé: "¿Por qué no?". Así que los embromé bien embromados, porque me subí al árbol con la Lettera y escribí todo. Se quedaron mudos, claro: ¿qué podían decir?
Lettera vive contigo
Olivetti Argentina
1971

 

 

siguiente