Illia vio carteles que le echaban en cara haber
liquidado el autoabastecimiento petrolero; habló a una "multitud" de
300 personas, desairó a la C.G.T. y no atendió a periodistas que
reclamaban por la falta de libertad de expresión. No vio en cambio
al barco petrolero que por esos días desembarcaba en Puerto Madryn
65.000 toneladas de petróleo importado. Una fastuosidad pocas
veces vista en la región —tal vez como nunca— fue desplegada por las
autoridades de Y P F empeñadas en esconder tras las fanfarrias, el
eco de guitarras y los gallardetes, el profundo drama del retorno a
la importación petrolera. Llegó el Presidente. Junto a Facundo
Suárez. En la ciudad fue recibido en la sede comunal. Entre
concejales, funcionados y radicales del Pueblo, el público alcanzó a
sumar unas trescientas personas. Protesta repetida en las paredes
del centro, donde manos anónimas, no identificadas por color
político, habían desplegado carteles amarillos y negros en los que
se decía: "DOCTOR ILLIA: DEVUELVANOS NUESTRO TRABAJO. PARE A LOS
IMPORTADORES DE PETROLEO. HAGALO. ENTRE LA POLITICA Y EL PAIS, LOS
PRESIDENTES ELIGEN EL PAIS". Otros miles de panfletos con
leyendas similares aparecieron en las calles y en las zonas donde
debía pasar el Presidente. Para colmo de males, el temor a no tener
público luego del ardor puesto en la programación, impulsó a los
organizadores del festejo a determinar que los trabajadores de Y P F
y sus familias, asistieran a todos los actos con la presentación del
carnet de la obra social, y en forma absolutamente gratuita. El
resto de la población, aquella que también trabaja y siente como
suya a la industria petrolera, pero que hace la grandeza del país en
las otras actividades productivas, debía hacer frente al pago de sus
entradas. Esto era válido para los espectáculos deportivos, como
artísticos o reuniones sociales.
La Política actual Por la
noche del 13 de diciembre, en el salón del Centro Catamarqueño, el
presidente Illia fue agasajado con una cena. En el transcurso del
ágape habló el doctor Facundo Suárez. Dijo que Y P F había,
recobrado su prestigio pues había superado problemas financieros,
remozado sus sistemas de transporte y contribuido con sus fondos a
la actividad de las provincias petroleras y a la construcción de
obras en todo el país. Habló de la nueva política de integración
petrolera latinoamericana y aunque se mostró satisfecho de haber
incrementado en el 3,7 % la producción con relación al año anterior,
se cuidó de dar cifras sobre la importación de crudo en el exterior
para cubrir nuestros déficit, y de decir que el incremento anual
durante el gobierno de Frondizi fue del 33 %, ¡diez veces más!
Planteo presidencial Después habló el Presidente para todo el
país, desde Comodoro Rivadavia. Su palabra fue seguida con interés y
en silencio. El doctor Illia exhortó a tener fe en el trabajo de
todos y en el esfuerzo conjunto. Aseguró que habría financiación
para las obras básicas que reclama nuestro desarrollo. Adelantó que
en 1965 estarán completados los estudios de El Chocón-Cerros
Colorados y se conseguirán los créditos para construir las obras.
Prometió que se hará el acueducto para Puerto Madryn. Indicó que se
completarán los trabajos de riego en la zona patagónica y expresó
que "la región está muy cerca de los despachos nacionales, El primer
magistrado quiso en algún modo desdibujar la imagen que sobre su
tranquilidad provinciana se ha hecho el pueblo de la República. Dijo
entonces que "no deseaba ni aspiraba a mostrar un presidente
dinámico, sino que constituyéramos una nación dinámica". Muy buena
la figura. Muy mala la impresión. El empuje de la resolución y el
ejemplo, aquí como en los demás pueblos del mundo, siempre ha sido
la misión y la función de quienes han sido llamados a ejercer
representaciones o liderazgos. Pocas horas después visitaría la
sede de SUPE —dirigido locamente (textual) por Juan Pozas, radical
del Pueblo— mientras negó una audiencia a la Delegación Regional de
la C.G.T., gestionada por el propio gobernador de Chubut, escribano
Roque González, en la que los líderes obreros plantearían los
problemas derivados de la desocupación y la mi-prensión (textual).
En cuanto a la libertad de expresión, atribulados cronistas
patagónicos buscaban ese mismo día un contacto con el doctor Caeiro
—y a través de éste con el Presidente— para frenar una nueva
embestida del diputado nacional Oscar Herrera (U.C.R.P.) y Nélida
Baigorria, contra personal de la emisora local. Pero hay
esperanzas. Illia propuso en su exhortación cambiar la agitación
callejera por las urnas de marzo. Aseguró que habrá legalidad para
todos y que por ese camino llegará la comprensión. Si esto
resulta verdad y los jueces no desmienten al mandatario —como Solá
en el caso del respeto a los sindicatos y doña Nélida a la libertad
de expresión-— tal vez haya un saldo positivo de este discurso
presidencial con olor a nafta importada.
Fin de fiesta
Porqué en este cúmulo de contradicciones con que se celebró el "Día
del Petróleo Nacional" fastuosidad-miseria; hijos-entenados;
sindicatos amigos-trabajadores con problemas, hay que agregar algo
más. En aguas del Atlántico, en un Golfo de la provincia donde
nació la industria petrolera argentina, un barco liberiano "Olympic
Challenguer"de 65 mil toneladas de desplazamiento —era aguardado al
momento de escribir esta nota—, para transbordar a buques de Y P F
su carga de petróleo importado. Frente al campo de operaciones
donde se ganó la batalla del petróleo, el pueblo debía asistir a la
derrota a que nos condujeron los "comandantes de la importación".
Revista Qué 23.12.1964
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POR sexta vez en sus
62 años, la ciudad recibió la visita de un presidente de
la República.
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