Testimonios
De Paco Jamandreu: "Eva Perón, la más importante..."

El modisto Paco Jamandreu tuvo el privilegio, entre otros, de vestir a Eva Perón y de compartir algunos momentos con ella. Hoy, a tres décadas de la desaparición física de Evita, relata algunos entretelones de la vida de la defensora de los "descamisados"


Paco Jamandreu
"Mi primer contacto con Eva fue en Abril de 1944; ella era estrella de radio mientras yo comenzaba recién mi carrera, vistiendo en todas las películas importantes de esa época. Eran protagonizadas por Zully Moreno, Fanny Navarro, Mirtha Legrand, Sabina Olmos, Amelia Bence, Paulina Singerman, María Duval y muchísimas más, incluso extranjeras. A raíz de esto me llamó, siendo todavía estrella de radio, cuando ya empezaba su vida política. Fue un sábado a la tarde.
Realmente, me impacto como muy bonita; a los diez minutos ya estaba fascinado por ella. Desde el primer momento me pareció sensacional, increíblemente hermosa, una mujer maravillosa". "El trato conmigo fue siempre muy cordial, no era como con otras figuras que comienzan a tratarte de che siempre, ella me tuteaba pero yo le decía de usted".
"Entonces me dijo que tenía dos caminos, el artístico y el político, debiendo hacerse ropa para los dos pero sin saber todavía cual sería el definitivo. Tenia que hacer su primera aparición con el Coronel Perón en una concentración el primero de Mayo, entonces me preguntó acerca del vestido que le haría. Le contesté que lo que le haría sería un tailleur en cuadrillé. Este tailleur es el que todos se refieren como la segunda piel de Eva, puesto que se repitió muchísimas veces, algunas con terciopelo en el cuello, en los botones, con polleras tableadas, lisas... La imagen que todo el mundo tiene de Eva es con ese tailleur. Era un Príncipe de Gales blanco y negro con un cuello y botones de terciopelo".
"Después me pidió un traje para el Colón. No iría con Perón, lo haría sola en un palco vecino, pero estarían todos pendientes de ella al conocerse su amistad con el general. A éste le siguió otro traje muy importante prácticamente para terminar su vida radial; se presentó con éste en Radio Belgrano cuando era la mujer más escuchada del país con tres audiciones diarias. Este era dorado de lamé, que iba a usar con una orquídea en la cabeza. Entonces llamé para decirle que esa orquídea no tenia nada que ver con el vestido. Luego de darme la razón, a último momento se la sacó y no la usó. Este traje fue repetido, ya en el 50, para otra función del Colón, y era drapeado con una larga cola que se usaba como chal".
Yo no era sólo el que la vestía, tenia una amistad. Me trataba como un chico, puesto que la conocí cuando tenía sólo 17 años, cuando comenzaba mi carrera. Fue siempre amiga, nunca le pedí nada para mí, solo le pedí para la cocinera y la mucama de casa, que eran madre e hija: le pedí una máquina de coser y un terreno que se lo concedió directamente. Después pedí para artistas que consideraban que estaban prohibidas, pero en realidad no trabajaban porque no las llamaban. Le pedí por Blackie que estaba en radio El Mundo y decía que no podía trabajar. Entonces inmediatamente llamó a la radio y pidió que la contrataran. Pedí por Nedda Francy, pedí por mucha gente y siempre me lo concedió. Fue muy amiga mía, muy confidente, había una raíz muy importante que es la que nace del hecho de que ambos nacimos en un pueblo, cercanos entre ellos, soñando ambos, ella con ser artista,
yo con ser modisto, prestándose para las burlas, para la maldad de la gente. Nos acercó mucho el hecho de que ambos sufrimos mucho en nuestros respectivos pueblos natales. También conocí a Perón ese mismo día, causándome una gran simpatía. Siempre me trató como un chico teniéndome mucha simpatía. Me amparaba mucho, me aconsejaba, puesto que en ese momento yo estaba en el boom. Me decía que haga esto, que haga aquello, que deje de hacer tal o cual cosa, que ahorre plata, un montón de cosas; que no salga mucho de noche, que tenga cuidado con quien me meto, no te hagas amigo de cualquier persona, me decía. Ella sabía todas las cosas de mi vida pero yo, por supuesto, le hacía confidencias. Ella no era de hacer confidencias pero también las dejaba adivinar. La vi desesperada el 17 de Octubre, no precisaba que me hiciera confidencias de eso. Siempre estaba muy preocupada por la pobreza, por la tristeza, por la angustia de la gente, muy interesada por la política mundial, lo que Argentina significaba a nivel internacional en ese momento".
"Tuve oportunidad de acompañarla a villas de emergencia, otra vez fuimos a tomar el té al "Águila", pero iba yo más a la casa de ella, aunque también venia a mi casa".
"Eva marcó una época en la moda y se vestía como las grandes figuras de la época. En el fondo prefería la ropa sencilla, pero durante un tiempo, usó ropa maravillosa pues decía que tenía que dar la imagen ante el pueblo y ante el mundo de un país rico y poderoso como lo era en ese tiempo Argentina. Pero para su vida de trabajo, de concentraciones usó siempre la ropa muy sencilla".
"Eva era muy amable con su personal de servicio y tajante con los que estaban en los puestos muy altos, se hacía !o que y cómo lo quería ó no se hacia. Les demostraba y les gritaba las cosas directamente en la cara a los que debía. Exigía lo que debían dar pero no era arbitraria".
"Me hicieron muchos comentarios sobre Eva, buenos y malos, pero tengo la suerte que los comentarios malos que se hacen de mi vida o de la gente que quiero me los olvido. Fue muy discutida por mucha gente que no estaba de acuerdo. Lo que la gente decía sobre su persona le importaba muy poco, no era mujer de detener su camino por nada. Ni siquiera me preguntaba, como lo hacían grandes figuras entre los artistas y de la alta sociedad, qué me habían comentado del vestido, ó de cómo había lucido. Sólo me preguntaba sobre el vestido que se pondría, las alhajas que le combinarían, lo que le pondría a tal o cual ni preguntaba de la ropa de los demás".
"Le vi muchos momentos de impotencia; por ejemplo el 17 de Octubre pasó de la flaqueza a la fuerza en un segundo. Siempre iba a donde quería. Estaba muy segura de su camino a seguir, tal es así que, cuando estaba enferma, lo que más le preocupaba era el porvenir de Perón, del peronismo y del pueblo. La publicación de su libro "La Razón de mi Vida" obedece a dejar un legado que tuviera Perón al lado. Pensando bien las cosas, a la muerte de ella fue que el peronismo comienza con sus problemas. Eva, que en ese momento fue resistida por muchos no lo es por nadie en este momento. Es el mito más grande del mundo del momento".
"Tengo los trajes de Eva que me regaló Perón; Delia Parodi y Fanny Navarro, cuando comencé a coleccionar cosas de ella. Los que me regaló Perón fueron cuando los mandó a achicar para hacerle creer que iba a hacer un largo viaje, entonces ya muerta me los regaló. Salvo los que me regalaron no tengo otros, aunque el intendente municipal de la época del gobierno de Lanusse me prometió que me iba a dar algunos que estaban en el Banco Municipal, pero estaban sumamente deteriorados y eran los mas feos. Los buenos no estaban allí. Sabrá Dios dónde fueron a parar los otros. Lo que hago es llevarlos por el mundo junto con mi colección en los diferentes países por los que voy, puesto que sigo en vigencia total presentando mi colección 83, que son un poco como los de Eva, ya que se están usando un poco esas cosas. Los presento en el mundo para mostrar la elegancia de la primera dama argentina. Así lo hice en Chile, Paraguay, Brasil, lo haré en los Estados Unidos, muy probablemente en marzo, y si firmo contrato en Paris, en Punta del Este. Siempre lo muestro ante el jet-set internacional desde hace tres años como un homenaje a la mujer más elegante del mundo y primera figura de la historia, no sólo de éste sino de muchos siglos atrás".
"Voy a contar una anécdota que está en mi último libro sobre Eva titulado: 'Evita fuera del balcón' que está por salir en estos días, en el que cuento cómo fue que nació su preocupación por la ley de adopción. Fue un sábado por la tarde, estaba viendo una película llamada 'De Corazón a Corazón' (estaba yo junto al matrimonio). Luego de terminar la película Eva empezó a los gritos. Perón estaba dormido y decía 'mirá, esto es lo que yo quiero, que no haya más NN'. El General le dio piedra libre. Claro, el argumento era la lucha de una mujer por la adopción de los chicos para darles un hogar".
"Tenia un modo raro de descansar, lo hacia sentada sobre sus piernas, como arrodillada y tirada para atrás. Los ratos que descansaba no se le podía hablar porque no entendía.
Era de muy poco comer, hacía migajas con las galletitas de agua, comía verduras y a veces lo mito, tomaba té y se hablaba de muchas cosas: teatro, los últimos libros, movimientos culturales, las cosas que quería hacer".
"Al ser yo un muchacho joven tomé muchas enseñanzas, lamentablemente si yo hubiera tomado más consejos de ella otra cosa hubiera sido mi vida.
Me dejó enseñanza de amor, de fuerza de energía, constancia y de resignación".
"A pesar de haber vestido a las mujeres más importantes del jet-set mundial, Eva Perón fue la mas importante...".
Fascículo Nº 17 de "La historia de Eva Perón" (aproximadamente 1982)

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