Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 


Política Nacional
Revista Primera Plana
20.11.1962

Una semana cargada de rumores: Pero el "Día D" pasó sin novedad

En la noche del jueves al viernes último, dos oficiales del Ejército se reunieron en la Escuela de Mecánica con un grupo de suboficiales. Presentaron en términos duros la situación actual del país y los instaron a plegarse a un movimiento revolucionario qué debía estallar en las próximas horas. El mismo día, un civil recibió un llamado de un oficial de la Marina. Le transmitió un mensaje: "Hoy es viernes".
Los dos oficiales de Ejército fueron inmediatamente pasados a situación de retiro. El oficial de Marina falló: "Todavía no es viernes".
Dentro de ese clima, los secretarios militares y sus asesores, los tres subsecretarios y los comandantes en jefe de las tres armas, coincidían en un borrador del Estatuto de los Partidos Políticos, que quedaba definitivamente redactado en la noche del sábado. Más importante aún, coincidían en que el llamado a elecciones debía ser de carácter general, y que las elecciones debían producirse en junio próximo. El golpismo perdía su primera batalla seria en lo que va de este gobierno y rápidamente cerraba filas en torno a nuevas figuras militares y civiles. El coronel López Aufranc traía sus tanques desde Magdalena. Pero era más que evidente para todos que no existía ni la más remota posibilidad de alterar el orden.

El Estatuto
Un alto oficial de la Secretaría de Guerra definió del siguiente modo la elaboración del Estatuto de los Partidos Políticos: "Es muy importante limpiar la copa; pero tengamos cuidado de no apretar demasiado el vidrio, porque nos quedaríamos con los pedazos en la mano".
Con este espíritu, se aceptaron las observaciones de la Marina de Guerra al proyecto elaborado por el ministro Martínez, y por lo tanto se estableció un margen de inhabilitaciones peronistas más amplio del que se preveía. Pero no se aceptaron las sugerencias navales sobre una mayor intervención en la reorganización de los partidos democráticos.
Dentro de esta tesitura, se establecieron los siguientes objetivos:
• No herir al peronismo de modo tal que le quede únicamente el camino de la insurrección y del vuelco a la izquierda.
• Proveer los seguros suficientes para no herir a los antiperonistas.
A un oficial de Aeronáutica que participó en algunas deliberaciones, se le escuchó decir: "Abramos una puerta para la integración del peronismo en la vida democrática. Que no sea una puerta demasiado grande, para que no entre sacando pecho. Pero tampoco una puerta demasiado chica como para que deba entrar de rodillas. Simplemente, una medida adecuada para que entre con una inclinación de cabeza. Somos todos argentinos".

Desde Madrid
El mayor interrogante que se planteaba con inquietud en los medios que buscaban la pacificación del país la semana última, se refería, sin embargo, a Madrid.
El ex presidente Perón había hecho llegar, por intermedio del doctor Iturbe, una seria preocupación por la no aparición del Estatuto y el creciente deterioro de la situación económica. Con serias dificultades, explicaba el mensaje, estaba luchando el peronismo con los comunistas dentro de los sindicatos, que encontraban condiciones magníficas para ocupar posiciones y lanzar a los gremios a la lucha. Juan Perón consideraba que la aparición de un Estatuto digno le podía brindar armas para establecer nuevos objetivos para el peronismo, y equilibrar la acción del comunismo dentro de los sindicatos.
De todos modos, ya aparecido el Estatuto, el balance general de la situación será efectuado por Perón con Iturbe, en Madrid, seguramente en el curso de los próximos días.

La convocatoria
Mientras tanto, los funcionarios del Ministerio del Interior se extrañaban que hubiera tanta nerviosidad respecto del Estatuto.
Consideraban que el golpismo —neutralizado en gran parte en las Fuerzas Armadas—, tenia campo únicamente para desarrollar una intensa acción psicológica con vistas al futuro.
Esa acción, según los mismos expertos del Ministerio de Interior, tenía dos elementos primordiales para utilizar :
• La convocatoria a elecciones generales.
• La difícil situación económica por la cual atravesaba el país.
A menos en un aspecto, resulta evidente que los servicios informativos de la UCR del Pueblo actuaron con más eficacia que los de Aramburu en los últimos diez días. Mientras el sector aramburista confiaba en un llamado a elecciones de presidente y vice exclusivamente, la UCR del Pueblo ya sabía que la convocatoria sería a todos los cargos nacionales y provinciales, y formulaba concretamente ese pedido en las reuniones de su Comité Nacional hace más de una semana.
La convocatoria a todos los cargos, ofrece indudablemente una gran perspectiva a los partidos políticos y aleja por ahora la posibilidad de frentes nacionales, ya sea encabezados por Aramburu, Bengoa o Guevara.
Los partidos políticos que deberán encontrar candidatos para todos los cargos, desde la fórmula presidencial hasta las concejalías municipales, encuentran así una salida normal a sus actividades.
Algunos partidos nacionales —como el conservadorismo, por ejemplo—, que no tienen muchas posibilidades de un triunfo presidencial, ocupan posiciones destacadas en ciertos distritos, como Mendoza y Corrientes.
Todo les permitirá ahora, a los partidos democráticos, jugar un papel pacificador en el ámbito de la opinión pública.
Las elecciones generales se realizarán por el sistema proporcional. Hay provincias cuyas leyes ya lo permiten. Hay otras en las cuales sólo se necesitará reformar la ley electoral, que puede hacerse por decreto de los respectivos interventores. Con esto, las elecciones de junio permitirán por lo menos constituir el Senado en sus dos tercios. En las provincias que necesitarán de una reforma constitucional para establecer la proporcionalidad absoluta, se convocará simultáneamente a constituyentes.
El país entra, así, en la proporcionalidad. Resulta curioso señalar que el actual equipo político del gobierno triunfa ahí donde fracasó el gobierno de Aramburu, que no logró imponer la proporcionalidad para las elecciones de 1958, dejando así sin solución política a numerosos partidos de sólida influencia en la vida nacional.

Situación económica
Distintos voceros militares por un lado, y voceros del presidente Guido por el otro, solicitaban al ministro Alsogaray, al concluir la semana última, que hiciera cualquier esfuerzo, que tomara cualquier medida, aunque más no fuera una sola, que diera la sensación de que algunos problemas económicos comenzaban a tener principios de solución. Al mismo tiempo, los mismos voceros de los dos sectores, le garantizaban su permanencia en el cargo.
Es así que una tarde, los doctores Presce y Bermúdez Emparanza (surgidos de la UCRI), subsecretario de Economía y secretario de Energía y Combustibles respectivamente, se entrevistaban con Alsogaray en nombre de Guido. Estimándose los dos con experiencia política suficiente, explicaron largamente al ministro de Economía la necesidad de producir algunos hechos económicos que aliviaran la situación y distendieran las presiones de los sectores empresarios. Estas presiones, aun cuando no tenían contenido político, se superponían inevitablemente a las presiones de quienes postulaban para la Argentina, como mejor solución, una dictadura enérgica durante los próximos 5 años.
Por su parte, los voceros militares transmitían la siguiente reflexión de las Fuerzas Armadas: ¿Qué sentido tenia la remoción del ministro Alsogaray? La larga lista de posibles reemplazantes, que es siempre la misma, incluía los siguientes nombres: Alizón García, Blanco, Krieger Vasena, Moyano Llerena. ¿Es que alguno de ellos tiene alguna varita mágica?, volvían a preguntarse. ¿Es que la situación económica argentina permite milagros?, era la última pregunta.
Si no existen soluciones inmediatas, no hay otro camino que aguantar o cambiar totalmente de estructura, orientándose hacia un dirigismo que cambiaría todos los esquemas: en este caso había un solo candidato en danza, el doctor Gómez Morales. Lo que, para todos, resultaba totalmente fuera de lugar.
Estas reflexiones constituyeron el aval para Alsogaray. Pero ese aval le fue presentado con una categórica requisitoria: "Por favor, medidas urgentes de alivio. Mejor trato a los problemas sindicales, para aliviar lo más posible las tensiones. Formular una seria advertencia a Galileo Puente".
• Consultados los oficiales de los servicios de informaciones militares por algunos redactores de PRIMERA PLANA, expresaron al concluir la semana: "Las actividades conspirativas forman parte de la normalidad. No hay nada nuevo realmente importante. Lo único realmente peligroso es la situación en la zona sur del Gran Buenos Aires, donde los comunistas han encontrado un campo magnífico para su labor proselitista". Resultaba evidente así que Alsogaray y Galileo Puente debían producir algunos hechos concretos.
• Mientras tanto, noticias llegadas de Washington informaban sobre un primer éxito de Alsogaray: el Banco de Exportación e Importación prorrogaba por tres años el comienzo de pago de una deuda de 72 millones de dólares. Esta medida le permitirá a Alsogaray, seguramente, moverse con mayor independencia en el campo del dólar.

Acción psicológica
Para información del señor Director
Durante los últimos días, hubo en los ambientes políticos numerosas referencias a la acción psicológica que en la calle efectúan diversos sectores. Una rápida encuesta sobre el fenómeno, ha revelado lo siguiente:
• Los grupos de acción psicológica actúan preferentemente sobre los redactores políticos de todos los diarios. Si bien los diarios no publican la mayor parte de la información que reciben de ese modo, y sólo es utilizada bajo el rubro "Para información del señor Director", es una vía segura para crear un clima o un estado de ánimo en vastos sectores, ya que la difusión es muy rápida.
• Los grupos de acción psicológica se distribuyen la tarea de acuerdo a temas que deben ser difundidos. Sobre cada tema se inventa un hecho aparentemente ocurrido, o una anécdota que es relatada con lujo de detalles.
• Cuando esos hechos son difundidos, quienes buscan confirmación en fuentes distintas a aquellas de donde recibieron la información, se convierten a su vez en difusores. Cuando ese hecho llegó ya a la segunda fuente consultada, da la impresión de que es cierto, si bien en esa segunda fuente también fue recibida la información por la vía de la acción psicológica.
• Algunos periodistas realizaron experiencias para comprobar con qué velocidad funcionaban los mecanismos. Así, inventaron hechos, comenzando su difusión en el Congreso, por ejemplo, y a la media hora, desde la Casa de Gobierno se hacían veloces encuestas tomando como base, precisamente, el hecho inventado.
•Dentro de este mecanismo, se espera para la semana que vivimos un recrudecimiento de los trabajos de acción psicológica en todos los frentes. Se pudo saber, además, que los expertos del Ministerio del Interior están estudiando, por su parte, una contraofensiva. Por lo tanto, habrá seguramente rumores para llenar todas las conversaciones de los argentinos durante varios días.

 

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