Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 


Festival en Racing
Solo una tormenta
Revista Pelo
Nº 67 (1975)

Racing Club Rock

Este festival fue el primero de los eventos importantes de este mes en el que se pretendió mas que nada adelantarse a toda una serie de espectáculos programados anteriormente, capitalizando de esta forma la expectativa suscitada por un publico ávido de grandes reuniones.
Escasamente publicitado, sospechosamente organizado con poco tiempo, apenas algo más de dos mil personas desafiaron un calor aplastante para escuchar a Litto Nebbia Trío, Los Jaivas. Alas, Ave Rock, Polifemo, y Gustavo Santaolalla en el estadio del Racing Club. Desde su inicio, todo transcurrió con mucha calma merced a la buena disposición del público. A las tres de la tarde, sin ni siquiera un escenario, arrancó el trío Alas: tres largos temas sólidamente interpretados. El sonido fue quizás lo único rescatable, entre la sonrisa profesional del locutor Wilmar Caballero, y los nubarrones cada vez más amenazantes.
Con Ave Rock y una buena versión de 'Viva Bélgica", comenzaron a caer las primeras gotas. A pesar de la amenaza meteorológica. Litto Nebbia y su trío desparramaron sobre la gramilla su sonido particular y un clima de comunicación con el público. La lluvia arreció, y el equipo de sonido comenzó a ser retirado; el público buscó protección en las plateas techadas.
Los Jaivas demoraron bastante para acomodarse y empezar a tocar; con el primer tema —"Pregón para iluminarse"— se desató la tormenta con toda su fuerza. Sin explicaciones de ningún tipo, el publico fue invitado por los agentes de seguridad a retirarse ordenadamente.
Con buena voluntad, casi estoicamente, el defraudado publico acató la sugerencia y rápidamente abandonó el estadio
No se puede siquiera hablar de un saldo porque nada fue dado, y la única respuesta debe ser la que quedó en las arcas de los organizadores que pergeñaron tan magro espectáculo. Todo fue intrascendente, hasta la misma actitud del público, que después de abonar 120 pesos de los nuevos ni siquiera intentó una protesta al ser interrumpido el evento. Lo único para el recuerdo fue la tormenta.

 

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