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MORIS
Las obras de MorisHay veces en que uno se pregunta cuál es el sentido de editar un
álbum en vivo. En el caso de Moris, la intención debe haber sido la de juntar en un
mismo registro las canciones más exitosas de todas sus épocas, sumadas a la excitación
de las actuaciones. Pero tanto uno como otro motivo se vieron frustrados en el resultado
final del disco. Primero porque teniendo las canciones viejas junto a las de la etapa
española, las antiguas crecen en su valor. Segundo porque ninguna de las versiones
alcanza siquiera el nivel de las grabaciones originales. Temas de una belleza simple como
"El oso" aparecen aquí desdibujadas en pálidas versiones. Ni hablar de
"La balsa" o "De nada sirve". También fracasó la excitación, porque
este disco fue grabado el 21 de marzo pasado, en un Obras con poco público y sin la
"calentura" que tuvieron tos conciertos del año anterior.
Otro factor que hace pensar cuál es el sentido de este disco, es el sonido.
Realmente pésimo, hay acoples, ruidos, zumbidos. El excelente trabajo del baterista
Dannyel Assante se ve aquí injustamente desdibujado. Su batería es una bola de agudos
ubicada en un plano muy atrás. Lo mismo ocurre con la guitarra de Antonio Molina. El bajo
de Marcelo Fuentes está bien adelante, con un sonido excesivamente grave. Y delante de
todos ellos, la voz de Moris en un trabajo poblado de desaciertos.
Realmente no se explica el por qué de una edición de este nivel.
revista Pelo 146
RAÚL PORCHETTO
Televisión
Para Raúl Porchetto su
auténtica carrera musical comenzó el año pasado, cuando editó el apabullante
"Metegol". Lo demás, servirá para los historiadores y para él como el más
primario aprendizaje. El resultado es "Televisión", el álbum de rock'n'roll
más moderno que se haya hecho en la Argentina. ¿Por qué? Básicamente el sonido.
Porchetto tiene una de las formaciones más completas y poderosas de la Argentina, y
cuando se ponen en el estudio consiguen el mejor, el más acabado sonido que jamás haya
logrado un grupo nacional. Porchetto está marcando un hito en la producción
discográfica, y esto inevitablemente llevará a replantear conceptos a los grupos grandes
(incluso más populares que el de Porchetto) respecto al sonido hecho-en-el-toilette que
prolifera.
"Televisión" no es una invectiva contra el género, Porchetto es
demasiado inteligente como para perder el acetato en un tema tan vapuleado. Su propuesta
es inversa: el mensaje es para los que están delante de la pantalla, alienados por una
realidad-fantasía que los comprime cada día más, y que sólo deja rectángulos de
cuarenta centímetros para sonar con otra vida mejor, y a todo color.
"Habrá días de sol" es la apertura de un álbum en el que
mayoritariamente se percibe un sentimiento de escepticismo, de melancolía. Pero también
tiene mensajes de esperanza. Porchetto cree en eso, y por eso abrió el long play con ese
tema, donde el amor y el optimismo están subrayados por un riff alegre sostenido por los
compactos vientos de Hugo Pierre y Beny Izaguirre. "Me siento bien" es una de
las mejores canciones del álbum, sobre una base bien nueva ola Porchetto canta
cansinamente: una verdadera pálida. "No me dejes caer" es una simple canción
de amor donde la realidad asoma como el factor desestabilizante. Esta es una de las
constantes literarias de todo el álbum. Porchetto intenta cantar realidades y no transar
con metalenguajes o viajes cósmicos. "Qué chatura señor" y "En el fondo
del cielo" tienen mensajes claros, de angustia, pero de defender desesperadamente la
esencia del hombre: su dignidad y el respeto por la vida.
A esta altura no se puede adjetivar el trabajo del grupo de Porchetto, simplemente
decir que ellos grabaron el mejor disco de rock nacional que se editó este año.
revista Pelo 154
SERU GIRAN
Peperina
En 1978 Seru Giran daba sus
primeros y titubeantes pasos en la escena nacional. Lentamente, el grupo fue imponiendo la
nueva línea musical que tantas resistencias había encontrado en los primeros tiempos.
Hoy, esa música está impuesta, el grupo institucionalizado y es considerado como el más
popular
"Peperina" tiene las marcas familiares de toda la música de Seru Giran:
canciones melancólicas, melodías agradables sobresaltadas por algún riff ardiente, y
las mismas falencias de producción que el grupo arrastra desde su primer trabajo
discográfico.
La gran estrella de este álbum, que se venia insinuando en "Bicicleta",
es David Lebón. Sus composiciones son cada vez mejores, y si bien no está en el nivel de
García, sus temas tienen una especie de candor muy particular. Es, además, el que mejor
canta en el grupo -y uno de los mejores del rock-, y sus progresos con la guitarra se
sienten con aplastante recurrencia. "Parado en el medio de la vida" tiene toda
la inocencia y el misticismo que Lebón puede imprimirle a sus canciones; "Esperando
nacer" (con letra de García) es un blues muy caliente en el que Lebón
"derrite" las notas en una intensa intervención en guitarra. "Cara de
velocidad" tiene un riff frenético y es el tema con más energía de todo el álbum.
"Peperina" representa el aporte testimonial de García, aunque tal vez el
viaje esta vez sea más introspectivo. Sólo "Cinema verité" refleja la
capacidad de García para contar sutilmente la realidad.
Sin la homogeneidad de "La grasa de las capitales", el álbum más
compacto de SG, "Peperina" es un buen long play que no decepcionará a los
seguidores de la banda, pero que inevitablemente plantea algunos interrogantes sobre el
futuro.
La inclusión de algunas canciones parece forzada y desvirtúa el contexto del
álbum. "José Mercado" fue una audaz y lograda apelación en su momento. pero
ahora, en el contexto de la realidad en la que aparece, resulta inocentemente banal.
"20 trajes.verdes" y "Lo que dice la lluvia" son instrumentales que si
no hubieran estado, nadie lo hubiera lamentado...
Con momentos brillantes y también de opacidad, esta "Peperina" se
digiere con facilidad. Para Seru Giran llegó el momento más difícil: están en la cima
y lo que hagan puede hacerlos afirmar o tambalearse. "Peperina", en ese sentido,
puede ser un toque de atención; como esa extraña y aguda señal que se escucha al
comienzo de la segunda estrofa de la primera canción...
revista Pelo 154
SERU GIRAN
Peperina
Peperina; Llorando en el
espejo; Parado en el medio de la vida: Cara de velocidad; Esperando nacer; 20 trajes
verdes; Cinema verité; En la vereda del sol; José Mercado: Salir de la melancolía: Lo
que dice la lluvia.
Personal: Charly García, piano, voz, mini Moog, órgano, efectos: David
Lebon, guitarras, voz, tumbadoras, timbaletas; Pedro Aznar. bajo. voz. bajo Moog, Mini
Moog, órgano, brass OBX. piano acústico, guitarra acústica, efectos; Oscar Moro.
batería y efectos.
Grabado en los estudios Ion (BA). salvo el tema 11. grabado en Wacameca Studio.
Producción de Serú Giran para SG Records. Sonido: Amilcar Gilavert.
* * *
¿Todavía no escuchaste "Peperina"? ¿Me dejas que
te diga algunas cosas con respecto a este disco? Bueno, ahí van. ¿Si me gustó? Y ...
sí. Es un álbum bien hecho, bien grabado, bien tocado, bien cantado, bien producido,
bien presentado. Sí, casi todo de primera. ¿Por qué "casi"? Ya te voy a
contar.
Déjame decirte, primero, qué trae. Como era de esperar. hay nuevos retratos de
Charly describiendo un universo especial, con algunas imágenes que van desde las
cristalinas a las oscuras. García sigue recorriendo perfiles cotidianos y sumergiéndose
en descripciones e historias de amor y soledad, de análisis interior y de observaciones
muy personales. Siempre basado en la canción, las melodías acompañan a las palabras con
soltura, como ya es costumbre en el. Es un excelente compositor-letrista, como vos bien
sabes. David aparece cantando bien -como casi siempre-, con su peculiar pronunciación:
"Chengo el -corazón abierto/chodo el mundo puede ver . . .". Por ahí se
descuelga con su característica guitarra en oportunas apariciones y sigue acompañando a
Charly en un dúo compositor tan parejo y que funciona tan bien como pocas veces hemos
tenido por estos pagos. Moro y Pedro aportan lo suyo con profesionalismo -en el buen
sentido del término- y con pulcritud. Ah y como ya parece normal, Aznar pone su tema al
final del lado 2, en un trabajo absolutamente personal.
Por si no lo sabes, entre los temas de "Peperina" está "Parado en
el medio de la vida", una canción que no es otra que "Con los ojos
cerrados". Si. ese rema que figuraba entre el material de "Bicicleta" y que
finalmente se descartó para ese LP. Ya sé que es lindo, pero uno hubiera deseado
escuchar algo más nuevito ...
¿Pensás igual? También está "José Mercado". Acá hay algo que no
entiendo: en "Bicicleta" no apareció porque se pensó que era un tema
"temporal". Y ahora, cuando ya nos pasó la invasión de lo importado, y ese
José Mercado es historia, viene a salir en este disco! ¿Vos no pensás como yo, que
cuando algo no se pone a tiempo, es preferible no ponerlo nunca más?
Ah, y falta "Inconciente colectivo", ese temón de la cosecha anterior,
pero que no ha perdido vigencia para nada. ¿Por qué no está? No sé.
Bueno, dejando de lado esos detalles, paso a evaluar el contexto general.
"Peperina" tiene un nivel parejo, lo cual es bueno por un lado (hay una solidez
elocuente, que lo convierte en un producto altamente comercial -lo cual es bienvenido, ya
que una cosa es hacer una obra que resulte comercial y otra es "fabricar un producto
comercial" -) y contraproducente por el otro. ¿Por qué? Porque no hay temas que
descollen, que hagan pensar seriamente, que transmitan vibraciones fuertes como lo
hicieron aquellos de "La Grasa . . .". No hay un tema que te obligue a
escucharlo mil veces para saciar la necesidad de expresar sentimientos por medio de ideas
grabadas, como ocurrió con "Canción de Alicia en el país..."
¿Vos pensás que yo quiero decir que a este LP le falta emoción? No estás
errado.
Mira, para redondear el concepto, voy a rescatar, arbitrariamente, algunos versos
de los que figuran en las distintas canciones. Y con eso, voy a dirigirle unas líneas al
flaco del bigote bicolor que vos y yo queremos bien.
Víctor Pintos
revista El Expreso Imaginario 10/81 |
LOS JAIVAS
Alturas de Machu Pichu Del aire al aire; La poderosa muerte; Amor americano; Águila sideral;
Antigua América; Sube a nacer conmigo. hermano.
Personal: Claudio Parra, piano, clavecín. piano eléctrico, mini moog;
Gabriel Parra, batería, bombo legüero, timbales cromáticos, xilófono, trutruca. tark ,
voz: Eduardo Parra, piano eléctrico, mini moog. tarka: Gato Alquinta, primera voz.
guitarra eléctrica, bajo, guitarra acústica, cuatro, quena, zampoña, okarina: Mario
Mutis, bajo. guitarra eléctrica, zampoña, quena, voz.
Obra musical basada en el poema del mismo nombre, escrito por Pablo Neruda; Grabado
y remixado en estudios Pathé Marconi, Boulogne, París, salvo el tema 6, grabado en
Emi-Electrola. Colina, Alemania, en junio-jutio de 1981. Dirección artística. Los
Jaivas.
* * * *
Después de cuatro años de andar por Europa tocando y
viajando, aprendiendo y afirmando las raíces. Los Jaivas volvieron a grabar. Y aquí
está el resultado. Un excelente disco.
Para analizarlo, hay que comenzar apuntando que la obra musical fue concebida y
escrita con el fin de convertirla en banda de sonido de un video sobre Machu Pichu. De
ahí el carácter "cinematográfico" de algunos pasajes, con claras imágenes
ambientales.
Y también debe tenerse en cuenta que la misión de ponerle notas al profundo y
hermoso poema de Neruda (que figura en el Canto General) no era nada fácil. Por un lado,
había que respetar el sentimiento original, conservarlo y darle forma de sonido. Por el
otro, debía cuidarse la métrica e insertar cuidadosamente, en la melodía, verso a
verso, de la mejor manera posible. Esto, se nota, costó bastante. Por momentos se
advierte un esfuerzo por entonar las palabras que -obviamente- no fueron escritas para ser
letra de canción.
Finalmente, con su amor por la música y por esta América (que mucho los
extrañaba), Los Jaivas salieron airosos de este compromiso. Y presentan un sólido
trabajo, donde cada instrumento suena en su lugar y en su momento. Donde cada palabra trae
una montaña de emoción. Donde cada melodía huele a tierra. Además, ayudados por la
técnica europea, lograron un sonido puro y bien administrado en los distintos climas. Por
lo visto, le han sacado bien el jugo a los estudios de la Pathé francesa, codiciado
actualmente por los popes de la música internacional.
"Del aire al aire" comienza con algunos sikus soplando vientos
americanos, hasta que las palabras comienzan a subir "en la escala de la tierra (...)
entre la atroz maraña de las selvas perdidas, hasta ti, Machu Pichu".
"La poderosa muerte" es rescatada con un aire de carnavalito. "Ven a
mi propio ser, al alma mía, hasta las soledades coronadas. El reino muerto vive
todavía".
El lado 2 abre con "Águila sideral", un tema qué tiene un interesante
desarrollo, basado en el piano de Claudio, el bajo de Mario y la batería de Gabriel,
mientras la voz del Gato, distorsionada, recorre esa porción del poema.
"Antigua América" trae un clima épico envolviendo sólo tres versos.
"Piedra en la piedra, el hombre, ¿dónde estuvo?", canta el Gato, mientras cada
instrumento hace su aporte redondeando uno de los puntos más altos del LP.
Y llega el fin con "Sube a nacer conmigo, hermano", el único tema del
álbum que fue presentado en los conciertos de Obras. Este, permítaseme arriesgar un
vaticinio, pasará a ser uno de los clásicos del grupo. Tiene ritmo, calor, sentimiento,
y una letra como para leer detenidamente, palabra por palabra.
El piano marca la entrada, vienen bajo y batería, el moog de Eduardo se alza
marcando el camino, y sale la voz, afinadísima, subiendo vaya a saber uno hasta dónde,
reviviendo el texto de Neruda. "Sube a nacer conmigo, hermano. Dame la mano desde la
profunda zona de tu dolor diseminado" ... Saliendo tranquilamente, como quien reposa
después de un combate al rayo del sol. se cierra el LP con unas notas de piano
envolviendo los últimos trozos del poema. En síntesis, estos chilenos sacaron flor de
álbum de sus quenas, sintetizadores, guitarras, tarkas y trutrucas.
Como siempre, la portada estuvo a cargo de Rene Olivares. No sé si por el diseño
o por la impresión, no me gustó como otras. En cuanto a la presentación, es correcta.
En el interior de la portada doble están las letras (detalle fundamental) y en la
contratapa hay una completa ficha técnica.
Bien por Los Jaivas. Europa no les hizo perder el rumbo. El amor americano sigue
intacto. Y se eleva hasta la Alturas de Machu Pichu.
Víctor Pintos
revista El Expreso Imaginario 10/81
LILIANA VITALE-VERONICA CONDOMI
Danzas de Adelina
Desde hace un tiempo, este
dúo vocal femenino se viene insinuando como un elemento importante dentro del contexto de
la agrupación MÍA. Acaso por eso, "Danzas de Adelina" es el paso,natural que
debían dar para consolidar su propuesta. En este disco, Verónica Condomi y Liliana
Vítale muestran su gran capacidad para las vocalizaciones y el especial color de sus
registros. Ambas aman profundamente lo que hacen y eso se nota en el resultado final.
Ocho temas fundamentalmente vocales -con el ocasional agregado de algunos
instrumentos, en especial de percusión- brindan una muestra clara de su idoneidad para
trabajar los climas vocales, elaborar con inteligencia los arreglos, y hacer un disco
interesante teniendo a la voz como instrumento preponderante.
En "Danzas de Adelina" se incluyen tres temas que no pertenecen al dúo:
uno es una muy buena versión de "Los Castillos", de María Elena Walsh; otro es
un coral de Lito Vitale con cierto aire místico, y el restante es una excelente versión
de "A Starosta el idiota", de Luis Alberto Spinetta.
El saldo final de este primer trabajo individual del dúo es sumamente alentador,
ya que Liliana Vítale y Verónica Condomi consiguieron hacer un muy buen álbum coral que
las muestra en la plenitud de las aptitudes que venían demostrando desde hace un tiempo
en el seno de MÍA. Además, abren un nuevo camino en cuanto a propuestas se refiere,
hecho sumamente positivo, más aún si se toma en cuenta que fue realizado por mujeres,
eternas postergadas del rock nacional.
revista Pelo 158
GABRIELA
Ubalé
Gabriela Molinari es una cantante
argentina que hace ya varios años decidió tentar suerte junto a su marido, Edelmiro, .en
los Estados Unidos. Único estandarte femenino dentro del rock argentino durante mucho
tiempo, Gabriela alcanzó cierta trascendencia en nuestro país en base a un álbum y un
par de simples.
"Ubalé" es el primer trabajo -realizado bajo producción independiente-
que Gabriela logra plasmar en el exterior y en él se puede apreciar una curiosa
conjunción. Por un lado, hay temas de moderna factura, resultado obvio de estar en
contacto directo con uno de los lugares donde se generan las nuevas corrientes; y por otro
lado, están los temas emparentados con las vertientes folklóricas latinoamericanas. El
resultado final no es malo, pero tampoco convence del todo. No tiene sentido juzgar cuál
de los dos estilos es mejor o cuál es más válido. En "Ubalé" se puede
apreciar a la Gabriela "argentina" ("Desde tu corazón", "Que
tengamos casi todo") y a la Gabriela "americanizada" ("Todo en vos es,
corazón", "Bailar, soñar, bailar").
Para la grabación de este disco, Gabriela supo rodearse de un importante staff de
músicos (David Lindiey, Robben Ford, Alex Acuña, Laurie Buhne, Pino Marrone, Gustavo
Santaolalla, León Gieco, Aníbal Kerpel, entre otros) quienes aportan su reconocido
talento para jerarquizar el álbum.
Gabriela, por su parte, ha madurado como cantante y su voz suena mucho más suelta
y fresca que en otros tiempos, demostrando, además, una gran ductilidad para las
vocalizaciones pese a las limitadas posibilidades de su registro.
De todos modos, "Ubalé" es' un disco que tiene altibajos. Hay temas de
muy buena factura -perfectamente interpretados- y otros que se acercan peligrosamente a la
hibridez. Igualmente, habrá que esperar futuros trabajos para ver cuál de las dos
Gabrielas es la auténtica. En "Ubalé" están las dos y demuestran, cada uno en
lo suyo, que tienen
revista Pelo 158
LITO VITALE
Sobre miedos, creencias y supersticiones
Lito Vitale es un tecladista
de reconocida capacidad que en esta oportunidad decidió abordar una experiencia solista,
haciéndose cargo de todos los instrumentos en un disco que lo tiene como protagonista
principal y casi exclusivo. El tema elegido y que da titulo al long play es una síntesis
perfecta del clima que transmite este álbum. La música tiene características de
búsqueda climática y sirve como adecuada ambientación para la temática elegida. A lo
largo de los seis temas, éstas características se convierten en una constante bien
apoyada en un auténtico arsenal de teclados y efectos, en los cuales Vitale demuestra una
vez más sus marcadas influencias del rock inglés de los '70.
Compositivamente, da la sensación de no haber madurado aún un estilo personal,
apegándose en demasía a ciertos clichés. De todos modos, es elogiable el hecho de no
haber puesto la música al servicio de su virtuosismo. Lito Vitale es, esencialmente,
tecladista y eso se nota en su forma de componer, más allá de que su trabajo en otros
instrumentos sea más que aceptable.
"Sobre miedos, creencias y supersticiones" es un disco que demuestra una
vez más la seriedad del trabajo de los MIA
revista Pelo 158 |