Volver al Indice

crónicas del siglo pasado

Revistero
de rock

SANTANA
el espíritu del ritmo

Santana no es un grupo fácil. Para muchos significa el placer del baile, la reunión clamorosa, Woodstock. Pero hace ya mucho que la banda ha dejado de ser una fantástica máquina de ritmo, para transformarse en algo diferente. Santana ha evolucionado, ha sobrepasado las estructuras de su música original, ha expandido inimaginablemente los límites de sus posibilidades.
Ahora la formación aborda con habilidad la nueva música, siguiendo las huellas de Miles Davis; ha digerido y comprendido (y comprehendido) el patrimonio musical de otros pueblos, como el calor sensual de la música brasileña. Santana puede ser calificado como uno de los mejores grupos de jazz-rock.

Fuente: Revista Pelo mayo 1976

 



 

 

SANTANA (1966-1971)
Carlos Santana nació en Nueva México. Atraído, muy joven, por la música, dejó su casa familiar para ir a San Francisco. Es un autodidacta: no tiene ninguna clase de formación musical "seria"; aprendió solo a tocar la guitarra y se perfeccionó escuchando a sus maestros. Tocaba acompañando a los músicos locales, en todas las oportunidades que se le presentaban. En 1966, en un club de San Francisco, conoció a Gregg Rolie, que luego se convertiría en el organista de su grupo, aportando a la banda un color inimitable. La influencia de Rolie seria preponderante en los tres primeros álbumes del grupo. Cuando Santana y Rolie decidieron trabajar juntos, descubrieron a David Brown, un texano que había estado mucho tiempo en Nueva York tratando de encontrar algo en California. Interesados por los ritmos y la música latinoamericanos, compusieron una sección rítmica de gran valor: el baterista Mike Shrieve y dos percusionistas, Mike Carabello y José Chepito Areas. Este último, un joven nicaragüense, había sido elegido el mejor baterista de América Central, antes de viajar a California. Mike Shrieve había tenido oportunidad de tocar en varios grupos de rock, pero, sobre todo, se desempeñaba como baterista en la banda de jazz de su colegio en San Mateo; no le iba a costar mucho adaptarse a una formación que cambiaría varias veces de orientación musical.
En setiembre de 1968, Al Kooper y Mike Bloomfield organizaron una zapada memorable en el Fillmore West, que se repitió durante varias noches. La tercera noche Mike Bloomfield no pudo presentarse en escena, y en su lugar tocaron Elvin Bishop, Steve Miller y Carlos Santana; este último interpretó un tema de Jack Bruce y Paul Jones, "Sonny Boy Williamson", a su manera clásica, sin grandes originalidades. Después, se dio cuenta rápidamente de que el blues no era justamente su estilo.
Pero en 1968 reinaba el blues. El reino musical de San Francisco había terminado: Jefferson Airplane decaía, Grateful Dead ya había dejado de lado sus sueños ácidos, y los demás estaban diseminados y en vías de un cambio que aún no tenían claro. En medio de ese panorama, Santana proponía una nueva fórmula. Gracias a él el rock sabría absorber el calor de las músicas populares latinas.
El primer objetivo del grupo era el baile, y eso contribuyó a que tuvieran un notable éxito comercial, con su primera grabación. Y la actuación en Woodstock, en agosto de 1969, los reveló a un público ávido de vibraciones; para Santana, Woodstock no fue la consagración, sino el punto de partida de una carrera que se revelaría apasionante.
El primer álbum del grupo ("Santana", 1969), resultó demasiado serio; había buenos ritmos y temas eficaces, pero demasiado mecánicos en su realización; las armonías todavía estaban en desarrollo. La fórmula era atractiva, pero no aportaba gran cosa; la técnica de Carlos aún no tenía la suficiente precisión, y el grupo liberaba, más que nada, una energía que apenas lograba controlar. La versión de estudio de "Sacrificio Soul" era mucho menos interesante que la que se editó en el álbum triple de Woodstock, que había sido ejecutada con todo el calor de la espontaneidad. "Santana" no daba elementos como para predecir "Abraxas".
"Abraxas" (1970) es un nombre predestinado, y es extraño que el grupo lo haya elegido como título de su segundo álbum. Abraxas es una divinidad con el toque simbólico de conciliar el elemento divino y también el elemento demoníaco. La tapa de ese disco, una pintura de Mati, espléndida; abrasadora, era la imagen exacta del contenido de la música. "Abraxas" es la primera obra maestra de Santana: un álbum largamente premeditado, preparado con un cuidado meticuloso, con partes estructuradas y temas que se encadenaban fácilmente unos a otros para formar una gran homogeneidad. El grupo se había forjado una verdadera personalidad; la música latinoamericana era una gran influencia, pero al mismo tiempo un rasgo particular.
El estilo de Carlos había evolucionado; había preferido trabajar sobre su instrumento, y sólo firmaba el tema "Samba Pa Ti". Esa canción y algunas otras ("Black Magic Woman", "Gipsy Queen", "Oye Como Va") se convirtieron en clásicos que el grupo interpretaría durante mucho tiempo. "Abraxas" era un himno al sol y a la luz, uno de esos grandes álbumes que el tiempo no borra.
Cuando llegó el verano, grupo realizó su primera gira europea. Era la época de festivales como Bath, Rotterdam. Sobre escena Santana, era puro ritmo, y Carlos se impuso como guitarrista. Después de su actuación en Rotterdam fue considerado como el mejor solista. La formación tenía una perfecta coherencia y tocaba con convicción una música eficaz.
Después de "Abraxas" salió "Third", una síntesis de rock y música latinoamericana. Un nuevo integrante se había unido a la banda: Neal Schon, mucho más inclinada hacia el rock que Carlos. La presencia de Schon le permitió a Carlos deshacerse un poco del trabajo rítmico, para dedicarse al perfeccionamiento de sus solos y a las búsquedas sonoras, un trabajo que poco a poco fue llevándolo cada vez más hacia e lado del jazz. "Third" era un buen disco, en el que el lado latino del grupo aparecía más acentuado.

EL CAMINO DEL JAZZ-ROCK (1972)
En 1969, Miles Davis graba una pequeña obra maestra "In A Silent Way"; ese disco tuvo una repercusión extraordinaria en la historia del jazz, ya que Miles había electrificado su música, con lo que "modernizaba" su instrumentación. Las composiciones se alargaron, permitiendo a los músicos exprimirse sobre bases bien definidas. Davis, simplemente, había creado el jazz-rock, y, sin proponérselo, eso formaría escuelas y definiría un estilo. Hasta los músicos más tradicionales se plegaron al nuevo lenguaje a través del cual muchos pudieron expresarse con formas nuevas.
El 4 de julio de 1971 el Fillmore West cerró sus puertas. Santana participó de la reunión final, y tocó "In A Silent Way", en homenaje a Davis; lo hizo muy bien; con algunas modificaciones, la banda podía adaptarse a esa orientación musical. Pero Carlos prefirió proceder por etapas.
Después de algún tiempo, en el seno del grupo empezó a reinar cierta tensión; ya habían tratado de separarse varias veces; había problemas de ego (Neal Schon cada vez se tomaba más libertades en escena, tratando de convertirse en un segundo líder), pero también había graves conflictos generados por el uso de las drogas, que habían llegado a desequilibrar seriamente a la banda. El primero en separarse fue Mike Carabello, a quien no le satisfacía la nueva fórmula música que empezaban a desarrollar; Carlos lo reemplazó rápidamente por James Mingo Lewis y Armando Peraza. El nuevo bajista se llamaba Doug Rauch. Para "Caravanserai" Carlos utilizó los servicios de Tom Buttley como base acústica. Carlos quería obtener una sección rítmica más fluida y Mike Shrieve y José Chepito Areas, que tenían una buena formación jazzística, se adaptaron sin inconvenientes. Gregg Rolie, siempre en el órgano, se rodeó de dos pianistas: Wendy Haas y Tom Coster (también en piano eléctrico).
"Caravanserai" (1972) fue grabado en un momento en que el grupo estaba atravesando por varias dificultades, pero el álbum no lo hacía notar, hasta el punto de que muchos lo consideran como la mejor obra de Santana. La música creaba atmósferas y climas y el espacio sonoro se había ampliado notablemente, abriéndose a las músicas ricas poco explotadas; por primera vez se evocaba el ritmo de Brasil, con un tema de Antonio Carlos Jobim, "Stone Flower", el ritmo de África también flotaba desde adentro de los temas. Era un retorno a las fuentes, pero acompañado por instrumentos nuevos: lo último de la electrónica se enfrentaba con las más viejas tradiciones. La discografía de Santana se acercaba cada vez más al jazz; "Every Step Of The Way" era la mejor evidencia. En ese tema, de una gran fluidez armónica, Carlos se expandía largamente con su guitarra, ya muy cerca de las búsquedas de McLaughlin.
En el otoño de ese año, Santana emprendió una nueva gira europea. En la misma época, Chick Corea se iba de la banda de Miles Davis para formar la suya propia, Return To Forever, fuertemente influido por la música brasileña. Davis, mientras, se aseguró los servicios de Airto Moreira, uno de los más grandes percusionistas de Brasil. Carlos Santana también decidió disolver su grupo; ya hacía bastante que tocaba con John McLaughlin, y ambos, además, compartían el mismo gurú: Sri Chinmoy. Juntos grabaron un álbum, "Love Devotion Surrender" (1973), resultado de sus búsquedas comunes; pero ese disco no resultó muy efectivo, ya que, a pesar de la presencia de excelentes músicos (Billy Cobham, Larry Young, Jan Hammer, Doug Rauch), los guitarristas dialogaban excesivamente, prolongándose el uno al otro desmesuradamente. Era, en general, un caos sonoro, aunque recompensado por dos piezas cortas acústicas de gran belleza: "Meditation" y "Naima", una composición de John Coltrane.

LA NUEVA BANDA SANTANA (1973-1976)
Carlos Santana evolucionó mucho dentro del mundo del jazz. Conoció a Alice Coltrane, viuda del famoso saxofonista, igualmente sumergida en una crisis de misticismo; ella firmó los arreglos de "Going Home", la composición que servia de introducción a "Welcome". Carlos había formado un nuevo grupo: Mike Shrieve (batería), Doug Rauch (bajo), Armando Peraza y José Chepito Areas (percusión), Richard Kermode y Tom Coster (piano eléctrico, órgano) y León Thomas, que ha trabajado durante mucho tiempo para Pharoah Sanders (voz). La banda así constituida grabó "Welcome", antes de viajar hacia Japón para mostrar su nuevo repertorio. Japón les deparó un triunfo total. La gira estuvo muy bien organizada: Fukuoka, Hiroshima, Nagoya, Osaka, Kyoto, Tokyo y Chitose formaron el itinerario. En Osaka dieron tres conciertos memorables, en los que privó un color netamente jazz; tocaron "Black Magic Woman'', "Gipsy Queen" y "Oye Como Va" como una concesión a sus grandes clásicos, pero lo magistral de la actuación fue la interpretación de "Caravanserai", más algunas composiciones nuevas que aparecían en "Welcome" ("Samba De Sausalito", "Yours ls The Light", "Going Home"). Santana hizo temas de Corea, Joachim Young, Antonio Carlos Jobim, Airto, Bayette, los grandes maestros del jazz y del samba. El grupo obtuvo una verdadera comunicación con el público.
El álbum "Welcome" es rico en climas diversos; Brasil está maravillosamente evocado, y el jazz magníficamente ensalzado. La cantante Flora Purim y el saxofonista Joe Farrell participaron de algunas secuencias, y también una orquesta de cuerdas. Pero es probable que el grupo haya insistido demasiado en los arreglos. El jazz-rock que practicaba la Santana Band tal vez carecía de real personalidad; si el aporte del jazz se había vuelto determinante, los músicos no daban la impresión de estar absolutamente seguros de cuál era el camino a seguir. Las músicas de Herbie Mann, John Coltrane, Miles Davis, eran evocadas a cada momento, pero sin una línea directriz. También estaba presente John McLaughlin, en un solo de guitarra como el de "Flame Sky". La música latinoamericana, los orígenes del grupo, estaba ahora reducida a lo esencial; a la percusión y al ritmo de samba. "Welcome" era un nuevo punto de partida, hacia una nueva música. Carlos Santana volvió a unirse a Alice Coltrane, con el objeto de hacer otro álbum. Mientras, José Areas preparaba el suyo; fue un disco honesto, pero sin genialidad, ya que, a pesar de ser un buen baterista es un compositor mediocre, incapaz de hacer progresar las nuevas tendencias musicales que lo empujaban. Carlos, por su parte también cometió un error: mezclar la música con sus convicciones religiosas. Con Alice Coltrane grabó un disco para iniciados que reunía un equipo imponente: Jules Broussard (que iba a unirse a la Santana Band), Dave Holland (bajista de Miles), Jack De Jonnette, Armando Peraza, Tom Coster, y muchos otros.
En el ínterin, la banda se había modificado radicalmente. José Areas amenazaba con irse del grupo, y Mike Shrieve se fue para trabajar en un álbum solista que nunca fue editado. Doug Rauch también desapareció de la escena, y dejó su lugar a su sucesor, David Brown. Carlos introdujo como baterista a Airto Moreira, que acababa de separarse de Return To Forever, el grupo de Corea; grabó dos temas: "Flor de Canela" y "Promesa de un pescador". Moreira fue finalmente reemplazado por Ndugu (León Chancler), el baterista del momento que, aunque está siempre ocupado por sesiones de grabación (George Duke, Weather Report, Jean Luc Ponty), no se negó a participar. Ndugu supo reemplazar a Mike Shrieve e imponer sus propios ritmos.
El resultado fue el disco "Borboletta", bueno a pesar de los problemas del grupo. "Borboletta" está maravillosamente construido; la banda tuvo la inteligencia de variar sus paisajes musicales. El tema "Promesa de un pescador" es una suntuosa muestra de bravura; Carlos ha dado lo mejor de sí mismo en un inolvidable solo de guitarra. Leon Thomas se había ido del grupo, y había sido reemplazado por Leon Patillo; los demás componentes de Santana que grabaron "Borboletta" son: Tom Coster en teclados, Richard Kermode en piano, Jules Broussard en saxo. El color es el jazz, y el calor es Brasil.
Ese mismo año Carlos participó de las sesiones de "Stories To Tell", el segundo álbum de Flora Purim; tocó la guitarra en "Silver Sword", una composición de Miroslav Vitous, el ex bajista de Weather Report. Pero Carlos, últimamente, ya no disfruta demasiado en los estudios y prefiere las zapadas, o las actuaciones inesperadas. En el Madison Square Garden tocó "Sympathy For The Devil", con los Rolling Stones, y también se unió a Clapton en un espectáculo en el anfiteatro de la universidad de Stanford. Eso, sin embargo, no significa que haya dejado de lado sus actividades con el grupo; está terminando un nuevo álbum y prepara una nueva gira europea.

Aclaración recibida.
Gracias David

David Dorantes    david.dorantes@chron.com  7/01/2009 18:27  Fecha
Mensaje Gente de Mágicas Ruinas,

Una correción sobre Carlos Santana. Buscando una información en google sobre la primera banda que tuvo el guitarrista Santana, encontré su página. Solamente hay una precisión que hacer, Carlos Humberto Santana Barragán, su nombre completo, no nació en Nuevo México como dice errónamente su artículo. Nació en 1947 en el pueblo de Autlán de la Grana, en el estado de Jalisco, en el occidente de México. En la infancia, junto a su madre y sus hermanas, dejó su pueblo natal para seguir a su padre, José Santana, quien se había ido a la ciudad fronteriza de Tijuana, en frontera con San Diego, California, a buscar mejor vida como músico de mariachi pues tocaba el violín. De hecho Carlos Santana aprendió a tocar primero violín que guitarra, por eso tiene ese slide. Quien le enseñó a tocar guitarra fue el músico mexicano Javier Bátiz, guitarrista de blues, a quien Santana había conocido en la calle Revolución en donde estaban todos los clubs de la ciudad. Luego la familia de Santana cruzó la frontera y se asentaron en San Francisco en donde Carlos formó la Santana Blues Band, y bajo ese nombre comenzó a tocar en los clubs de aquella ciudad antes de acortar el nombre al de Santana e ir para Woodstock, en donde todo el mundo le conoció. Ojalá puedan hacer la correción porque Santana, hasta el día de hoy, conserva la nacionalidad mexicana.
Gracias.
Atentamente
David Dorantes

Host: 130.80.28.26

 

 

 

volver al índice del revistero

Google
Web www.magicasruinas.com.ar

siguiente en la sección