Hace pocos días, León Gieco retornó a la Argentina tras un
fructífero viaje por Estados Unidos, Australia y parte de
Latinoamérica. En esta nota incluimos el relato que de ese viaje
hizo el santafesino en la redacción de Pelo y también una
primicia: el anuncio de su retorno a los escenarios argentinos
junto a una banda. Además, publicamos en forma exclusiva la nota
de uno de los críticos más importantes de Venezuela sobre la
presentación de Gieco en ese país.
León Gieco: "De Argentina me fui a Los Ángeles donde me encontré
con Gustavo Santaolalla. Le comenté toda la idea del álbum que
quiero grabar y se entusiasmó con mi pedido de que fuera el
productor. El álbum que quiero hacer es uno que rescate la onda
ideológica de la gira nacional. Quiero hacer un long-play
bastante nacional: voy a cantar zambas, canciones en quechua, en
guaraní. . . Yo ya no me meto más en los rubros. Lo que yo hago
no sé si es folklore, si es tango, si es rock. Yo ya no transo
más con ningún rubro. Yo cincho por la canción y chau.
"De los Ángeles me fui a Australia para tocar con Mercedes Sosa.
Yo le había propuesto a ella hacerle de apertura pero se negó
terminantemente, de modo que en la mitad de su show me llamaba
para hacer a dúo "Sólo le pido a Dios" y "La colina de la vida",
y después me dejaba solo en el escenario cantando cuatro o cinco
temas mientras ella tomaba un par de tés. El público era en su
mayoría latino pero también había muchos australianos, sobre
todo universitarios.
"Después de tocar en Australia volví a Los Ángeles y de ahí me
fui a México donde presenté mi disco -que fue editado por
PolyGram- en una conferencia de prensa hermosa a la que
asistieron cuarenta periodistas. De ahí nos fuimos a Caracas,
donde hicimos dos recitales en el Poliedro con Mercedes. Fue muy
lindo. En Caracas se vende mucho la revista Pelo y conocen el
rock argentino. Además, les encanta lo que se hace acá. Me
acuerdo que la primera vez que estuve allá me encontré con un
tipo de la CBS, que se llama Alfredo Churión, que se volvía loco
con Almendra, Los Gatos y Manal y yo no entendía por qué. Y
ahora que fui noté que había crecido el núcleo de seguidores del
rock argentino. En los shows me pedían "El fantasma de
Canterville" y "La mamá de Jimmy", o sea que conocen todo el
material. Los pibes de allá conocen el movimiento de rock
argentino y lo respetan muchísimo.
El periodista Gregorio Montiel Cupello es uno de los tipos que
más respeta nuestro
rock y que más ha pasado discos argentinos en la radio.
"A mí me vino fenómeno actuar con Mercedes en Venezuela porque
justo en ese momento la WEA editaba mi disco. El long-play es
una recopilación que se llama "Siete años" y que incluye en su
mayoría temas del cuarto disco y de "Pensar en nada", que son
mis dos álbumes mejor grabados. En Caracas viene muy bien la
cosa y voy a volver para presentar el disco en vivo.
"Después fuimos para Quito. Ahí se hizo un festival
latinoamericano muy interesante. Duró siete días y había doce o
quince artistas por jornada. Cada artista tocaba cuatro temas y
después subía otro de un país diferente. De Argentina estábamos
Tejada Gómez, el Quinteto Tiempo y yo. Realmente me fue muy
bien, la gente me aplaudió mucho y tuve que hacer tres o cuatro
bises. La prensa habló muy bien de lo mío y entonces de
Guayaquil la grabadora nos mandó los pasajes de avión para que
fuéramos dos días a hacer notas allá.
"La gira fue una experiencia muy buena. Nadie nos apoyó en nada
y ésta era la única forma de poder entrar en otros mercados. Es
increíble pero "Sólo le pido a Dios" es famoso en varios países
y sin embargo nadie le puso un peso atrás. Trascendió por sí
sola como trascienden algunas canciones. De "Sólo . . . hicieron
varias versiones en distintos países. Si gano dinero con ese
tema siento que me lo merezco porque no hubo ninguna
multinacional atrás poniendo plata para difusión. Estoy muy
sorprendido por cómo corrió el tema por todo el mundo. Ahora lo
van a grabar en alemán, en idish, en japonés. Para mí es
rarísimo todo esto.
" 'De Ushuaia a La Quiaca' va a salir a fin de año. Ya están
todos los temas y sólo falta que venga Gustavo para empezar a
trabajar. Voy a grabar con el Cuchi Leguizamón, con Sixto
Palavecino, con Tarrago Ross. Yo me dejo guiar por mi estado de
ánimo. Quiero entrar a un estudio convencido de que estoy
haciendo lo mejor. Hasta ahora no estaba convencido del disco y
no me gustaban los temas que había compuesto. Ahora descubrí
nuevas facetas mías y eso se lo debo a Mercedes Sosa. Creo que
mi nuevo disco es hermoso. Es un long-play muy folklórico porque
estoy atravesando una etapa especial. Ojo, yo no digo que el
rock murió ni nada por el estilo. Por más que cante un tema del
Cuchi Leguizamón me sigo muriendo con Police. Yo trato de sumar,
no de cambiar una cosa por otra. No quiero que la gente diga
'León se dedicó al folklore'. No. Yo estoy en la búsqueda de una
música que sea universal. Ahora salió lo que voy a incluir en
'De Ushuaia ...", mañana puede salir un disco de rockanroll. Yo
no me propongo hacer un álbum de folklore o hacer un disco de
rock, como tampoco me propongo componer un tema. Eso sale.
"En Argentina voy a volver a tocar en vivo recién el año que
viene. Ahora estoy armando un equipito de gente para tocar en
Venezuela, México, Cuba y Alemania. También es probable que haga
una gira por Estados Unidos con Mercedes. En España es un éxito
la versión de 'Sólo le pido ..." que hizo Ana Belén y entonces
me gustaría ir para allá porque es la primera vez que un tema
argentino es tan popular.
"Cuando vuelva a tocar en la Argentina lo haré con un grupo
aunque todavía no sé quiénes van a ser los músicos. Puede ser
que trabaje con la banda de Gustavo, pero eso depende de cómo se
de la cosa. Lo importante es que tengo un montón de ideas y
muchas ganas de trabajar."
Osvaldo Marzullo
BUSCANDO EL UNICORNIO
Silvio Rodríguez no sabe que el unicornio que tanto busca está
en la guitarra de León Gieco. Y sino, miren la guitarra de León.
Lo anterior ilustra y dibuja tanto lo que vio el público
venezolano como la onda en la que anda hoy día Gieco.
¿Cómo es que se puede explicar eso de un rockero argentino con
la gente de la Nueva Trova cubana, de un rockero argentino
tocando con Mercedes Sosa o con el grupo de música
afro-venezolana Madera?
Durante los cinco días que permaneció en Caracas, Gieco
desarrolló una intensa actividad entre recitales, contactos con
músicos locales, con algunos medios de comunicación y con la
disquera que acaba de editar en Venezuela un disco que recopila
diferentes canciones de León.
Pero lo más importante fue el hecho de que Gieco "abrió" la
puerta en Venezuela al rock argentino, convirtiéndose en el
primer rockero de Argentina en actuar en un escenario
venezolano.
Bombardeada durante años por el rock y el jazz de Europa y los
Estados Unidos, en los últimos años se ha despertado un interés
en Venezuela por conocer el rock argentino, un movimiento que,
en opinión de algunos venezolanos, es el más importante de
América Latina por una constante trayectoria que data de fines
de los años sesenta.
Bajo esta atmósfera es que se inscribe la aparición en Venezuela
de los dos últimos discos de Charly García, del primero de
Celeste Carballo y, ahora, el de Gieco.
Además, varios programas de radio se han interesado por este
material y algunos, ya varias veces, han dedicado emisiones
especiales exclusivamente a la historia del rock de la
Argentina.
En estos momentos ya no es sorpresa encontrarse en algún diario
venezolano con un comentario o alusión sobre Charly, Luis
Alberto Spinetta, Sui Generis o el mismo León.
Gieco llegó a Venezuela como una verdadera novedad al venir
acompañando a Mercedes Sosa en sus presentaciones en El Poliedro
de Caracas, un enorme domo donde han actuado desde Queen y The
Police hasta Eumir Deodato, Irakere y las Estrellas de Fania.
Mercedes actuó junto al guitarrista Nicolás Brizuela, el bajista
Savatini, el percusionista Osvaldo Avena y . . . León Gieco. La
compensación venezolana en el show fue la vocalista Lilia Vera
con su grupo, quienes vienen experimentando una renovación que
los está llevando a fusionar música folklórica venezolana con
bossa nova, salsa, jazz y Nueva Trova cubana.
El espectáculo de Mercedes se dividió en varias partes: tocando
junto a León "Sólo le pido a Dios" y "La colina de la vida", y
dejando luego al santafesino solo, quien, con su Ovation
electroacústica y su armónica, tocó varias de sus canciones más
conocidas: "Todos los caballos blancos", "Hombres de hierro",
"La cultura es la sonrisa", "Cachito, el campeón de Comentes" o
"Cantorcito de contramano".
Gieco fue aplaudido con respeto tanto por parte del público que
fue a ver a Mercedes como del que fue al concierto para poder
escuchar por primera vez a un rockero argentino.
Igualmente, los inmigrantes argentinos, chilenos y uruguayos
pudieron rememorar y reencontrarse con un músico que
especialmente forma parte de la vida de ellos.
Como se sabe, Gieco, antes de llegar a Venezuela, venía de una
gira por Australia y México, que luego de la estadía en Caracas
continuó por Ecuador y Colombia.
De esta forma, León no perdió tiempo en ir a conciertos locales
e inclusive participó en una zapada con la banda de Gerry Weil,
la cual, para muchos, es el mejor grupo que existe ahorita en
Venezuela. Se trata de un sexteto de jazz-rock latino que
elabora una música con una buena dosis de electrónica y con el
contagiante ritmo de la salsa.
Tanto Gieco como su manager Pity Yñurrigarro, el baterista Avena
y el bajo Savatini quedaron muy bien impresionados con el sonido
del grupo. Inclusive, Gieco y Avena en un momento se
incorporaron en pandereta, maracas y diversos instrumentos de
percusión.
Ese domingo en la madrugada, en un insólito encuentro entre el
rock argentino y la música afro -venezolana, León terminó
tocando en la habitación de su hotel con un percusionista
venezolano miembro de la agrupación Madera.
Por todas estas cosas fue que en Venezuela León dejó abierta la
posibilidad de grabar en este país, a donde regresa dentro de
unos meses, con algunos de los músicos venezolanos.
Por lo demás, el vocalista y guitarrista hizo una extensa
entrevista para un programa de rock latinoamericano
(Latinoamérica: la raza cósmica) que se transmite por la Emisora
Cultural de Caracas y que se está convirtiendo en uno de los
espacios más interesantes de la radio venezolana.
Un detalle curioso de la estadía en Venezuela fue el encuentro
que sostuvieron León e Yñurrigarro en casa de un amigo con
varias personalidades muy conocidas en Argentina y que
actualmente viven en Caracas: Caio —el baterista de los
Shakers—, Pot Zenda y el mismo Robertone.
La visita de León Gieco a Venezuela fue una iniciativa saludable
que, por un lado, abre las puertas al rock argentino, y, por el
otro, refuerza algo que se está viniendo: la integración musical
latinoamericana. Precisamente, tanto Mercedes Sosa y Milton
Nascimento como el propio León son un buen ejemplo de ello.
En Venezuela, algunos músicos tras oír las hermosas letras y
canciones de León no pudieron dejar de empezar a preguntarse por
qué es que este tipo de cosas no se conocen más en este país del
Caribe.
Gregorio Montiel Cupello Caracas - Venezuela