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Siete Días Ilustrados
13.06.1975
carta
El viernes de la semana pasada, en tanto el secretario de
redacción Alberto Agostinelli comenzaba a ordenar sus materiales,
recogidos en Europa durante casi todo mayo, el redactor Andrés
Oppenheimer ultimaba sus preparativos para viajar al Japón, en
donde desarrollará un plan de trabajo tan ambicioso como el que
cumplió Agostinelli: éste recorrió las fuentes de la latinidad
para escribir sobre los orígenes de nuestra raza, tras haber
cubierto el Festival de Cannes (Nº 416) y luego de visitar los
escenarios de las más importantes batallas de la Segunda Guerra
Mundial, además de la de Berlín (Nos. 413 y 414); en Japón
Oppenheimer tratará de descubrir la doméstica intimidad de una
nación que los occidentales observan siempre con un asombro no
exento de superficialidad. Su itinerario empieza en Tokio y
culmina en Hiroshima, aunque de vuelta hará una escala en
Hong-Kong, "un lugar que me fascina, que siempre quise conocer".
Esta costumbre de Siete Días de ensanchar cada vez más sus
fronteras de trabajo halla, en este número, dos ejemplos válidos:
la nota sobre una espléndida noche argentina vivida en Washington
el miércoles 4, en la cual estuvo presente nuestro corresponsal en
Estados Unidos, Juan Abraham; en informe sobre el verdadero
calvario sufrido por Federico García Lorca, que Armando Puente
giró desde Madrid. Esta edición contiene, además, tres
investigaciones especiales hechas en el interior, entre ellas una
prolija radiografía de la Base Naval de Puerto Belgrano como no se
vio nunca hasta ahora.
EL DIRECTOR
Fotos de tapa de Osvaldo Dubini (Liliana Belfiore), Juan Carlos
Franceschini (moda argentina) y Eduardo Nuñes (Ricardo Otero).
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