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Revista Siete Días Ilustrados
30.10.1972
EN ESTE NUMERO
La primera pregunta que se formula un editor cuando comienza
a definir un nuevo semanario es si quiere hacer una revista
"seria" o una revista "entretenida". En realidad, ninguna
respuesta a esta cuestión es del todo válida, ya que la
pregunta misma está mal formulada: una revista puede ser
seria y entretenida, y en cierto sentido debe serlo. Claro:
más fácil es dirigir la puntería a un público limitado, de
alto nivel cultural —desentendiéndose, entre otros engorros,
de un gran esfuerzo gráfico—, y excluir al lector medio; o
bien imprimir una revista de fotos, masiva, sin ningún
cuidado en la redacción y estilo y con una elección de temas
superficial y conformista. En este último tipo de
publicaciones es fácil halagar el lugar común o dejar de
lado toda imaginación: para que todo siga andando basta
—como diría Tato Bores— con "rendir culto al Gran Dios
Rating". Un vistazo a este número permitirá a sus lectores
observar una vez más por qué Siete Días se precia de no
haber caído en aquellas parcialidades: sin duda el
"entretenimiento puro" tiene su lugar, ya que no puede
pretenderse que el lector que ha salido, por ejemplo, a
pasar su week-end en algún lugar verde se enfrasque en
sesudos ensayos (para ellos, y en esa tesitura, se cuenta la
historia de un hombre de profesión amante latino, se echa un
vistazo al próximo film de James Bond —ahora sin Connery— o
se descubre la teoría y práctica del honor entre estudiantes
austríacos que aún hoy se baten a sable). Notas como el
informe sobre nuevos hábitos alimentarios en la Argentina o
el que estudia la situación de los latinoamericanos en Nueva
York, en cambio, exigen ser leídas con mayor atención y sólo
en ese sentido pueden ser consideradas "típicamente serias".
Pero obsérvese la nota titulada "Un desierto en llamas": ¿no
es tan serio como apasionante hurgar en la historia,
recordar que hace exactamente 30 años un general aliado
decidía, en los desiertos nordafricanos de El Alamein, el
destino de la Segunda Guerra? Quizás en esa nota se
ejemplifique mejor que en ninguna otra qué es Siete Días.
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