Revista Gente y la Actualidad
28.10.1971
Tapa Gloria Gago

DETRAS DE LA ESCENA
Héctor Zabala, Jorge Monti y el fotógrafo Gabriel Alvarado ya estaban en las oficinas del doctor Carlos Brignone, presidente del Banco Central, para hablar sobre el dólar y la situación financiera de nuestro país. En esta exclusiva entrevista se había trabajado previamente para elaborar el cuestionario y tratar de aprovechar al máximo el escaso tiempo disponible del doctor Brignone para el reportaje. Mientras esperaban la hora indicada nuestros hombres se dedicaron a evaluar minuciosamente el sobrio pero majestuoso despacho que en ese momento los albergaba. Alfombras, paredes enchapadas, arañas, lámparas, escritorios, piezas únicas, tinteros, cortinas y tapices. Era un elemento más para la nota y lo iban adelantando, pues durante la entrevista no habría tiempo para eso. Todo muy bien hasta el momento en que entró el secretario de Brignone y los hizo pasar al que iba a ser despacho de la entrevista. Nuestros hombres se miraron y entraron con una sonrisa. La pintura del ambiente la iban a dejar para otra vez.
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Renée Sallas trabajó dos semanas en esta nota. Estuvo simplemente a la espera. La mujer de José Neglia, uno de los más grandes bailarines argentinos, muerto en el terrible accidente aéreo, debía volver al Teatro Colón. Para nosotros no era la nota a una viuda sino una manera de conocer a este hombre que, en la cumbre de su carrera y de su popularidad, cae derribado por la fatalidad. Y además, con su mujer volviendo al escenario de esos triunfos, saber que en el arte, como en todas las cosas, la vida continúa. Renée logró su nota. Pero volvió en silencio y pidió respeto para esa mujer. Un tratamiento de la nota que no sea agresivo ni violento. "Esa mujer —dijo— lo único que necesita es ternura. . ., no periodistas."
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Samuel Gelblung y el fotógrafo Ernesto Carreño estuvieron el fin de semana pasado en una carrera de gatos. Pero volvieron tristes. No por la nota, pues había salido bien. Sino porque su participación en el evento había resultado desastrosa. Así como leen. Gelblung y Carreño encontraron un gato, lo apodaron "Mandinga" y lo pusieron en carrera. Pero con la terrible mala suerte que a la hora de la largada "Mandinga" salió corriendo en dirección opuesta a la llegada. Ni siquiera pudo llegar último. . .
Hasta la próxima.