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Año IV Buenos Aires, 20 al 26 de setiembre de 1966 Nº 195
CARTA AL LECTOR
Hace poco más de tres años, en julio de 1963, Primera Plana contrató los servicios para la Argentina del semanario norteamericano Newsweek, cuya influencia y prestigio admiten pocas comparaciones en Occidente.
Una semana después, reprodujo un notable reportaje de Robert K. Mac-Cabe, corresponsal de esa revista en el sudeste asiático, en el que resumía su experiencia de dos meses en la península indochina, entre insectos y metralla.
A partir de entonces, Primera Plana multiplicó sus asociaciones con otras revistas y diarios extranjeros, y amplió así el campo de acción que ya estaban cubriendo sus propios redactores, en viajes constantes a las fuentes de las grandes noticias internacionales. Los semanarios L'Express (Francia) y Vita (Italia), el diario Le Monde (Francia) y la Agencia de Prensa Nosvoti (URSS) se unieron a Newsweek para proporcionar el más vasto bloque informativo de que disponga una revista argentina en el exterior. Durante la semana pasada, Primera Plana consolidó en Nueva York la expansión de sus servicios a través de un nuevo convenio con la publicación norteamericnaa, cuyos detalles merecen reseñarse: a partir de este momento, Primera Plana no sólo retiene en exclusividad los derechos de Newsweek para la Argentina, sino que es también su representante único en todos los territorios de América latina. El carácter de este acuerdo es inusual en el periodismo nacional. Newsweek lanza 16 ediciones en el mundo, y fuera de los Estados Unidos imprime en Tokio, Sydney y Londres. Su potencialidad empresaria es una de las mayores en el mercado occidental de revistas. De ahí que, al confiar a Primera Plana sus derechos sobre un área vastísima, está revelando su confianza en la vitalidad periodística de esta editorial e implícitamente en la importancia de la prensa argentina. A más de mil días de distancia de aquel reportaje de MacCabe, la asociación entre Newsweek y Primera Plana puede señalarse como uno de los más fecundos ejemplos de colaboración empresaria y profesional que se haya producido en America.
Tal vez por eso mismo, Primera Plana concedió a los problemas del país toda la importancia que tenían, y envió a sus redactores a investigarlos: en Córdoba, uno de ellos indagaba la reacción popular ante los conflictos universitarios, la misma semana en que las refriegas entre estudiantes y policías cobraban su primera muerte (páginas 13 a 16); en Buenos Aires, otros tres obtenían del Subsecretario Tamborenea sus primeras declaraciones sobre la política laboral del Gobierno (páginas 20 y 21), mientras el historiador Arnold Toynbee resumía para Primera Plana, en sus habitaciones del Alvear Palace, el clima político de la semana internacional. Y otro más, en fin, desde el Chaco, enviaba un exhaustivo, penetrante informe sobre la vida indígena, fruto de travesías al interior del territorio toba durante dos semanas (páginas 70 a 73). Toda esa acuciante realidad encuentra —como en la vida cotidiana— un respiro donde la frivolidad se codea con la agudeza: es el suplemento mensual Primera Dama, incluido en las 16 páginas centrales de este número. Hasta el martes próximo. EL DIRECTOR.
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