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Año V Buenos Aires, 17 al 23 de enero de 1967 Nº 212
CARTA AL LECTOR
La semana pasada, sucesivamente, Guillermo Borda conferenciaba —en el mismo despacho donde su antecesor recibiera, en los albores del régimen Onganía, al grupo Tacuara— con las autoridades de la CGT y los líderes ferroviarios. Era algo más que un par de formalidades; al menos, así se desprende del todavía vago —o demasiado lírico, según otros— programa político que el Ministro del Interior intenta aplicar y que esbozó ante dos redactores de Primera Plana una tarde de la semana pasada (pág. 13/16).
• En los últimos días, los habitantes de Buenos Aüies se cocinaron a fuego lento, en su propio jugo. Para hacerle frente a la más furiosa racha de calor de la temporada, recurrieron a las fórmulas más idóneas: ante todo, la ropa más fresca y, de paso, la más presentable (pág. 39) o la más exótica (pág. 40); luego, la búsqueda de un sitió en donde zambullirse sin riesgo de ser pisoteados (pág. 42). La nota de las páginas 44/45 demuestra que el mundo acuático no es sólo propicio para suavizar el verano; también, para incrementar el potencial del país. .
• En abril, Iris Marga afrontará el mayor compromiso de su carrera: el personaje de la Celestina, en el escenario del San Martín (Buenos Aires). No es sólo eso: Iris Marga es una de las tres personas encargadas de guiar la Comedia Nacional durante 1967, y acaba de cumplir 40 años de permanencia continuada en las tablas. Estos datos terminan de convertirla en una verdadera institución, cuya trayectoria se narra en las págs. 60/62.
• El 19 de octubre, los estibadores argentinos se declararon en huelga: el Gobierno acababa de ordenar una reestructuración en los puertos. Como de costumbre, el de Buenos Aires sirvió de termómetro a la ofensiva oficial y a la de los obreros. La huelga quedó levantada a fines de diciembre. Esta semana, se cumplen tres meses del estallido; en las páginas 21/22 se transcribe un informe sobre los resultados logrados en Buenos Aires.
• Uno de los pasajes más curiosos (y más ignorados) en la biografía de Eva Perón, fue su amistad con el periodista español Manuel Penella de Silva, el autor de La razón de mi vida. Por primera vez en 15 años, los transcurridos desde que abandonó la Argentina y su colaboración con Evita, Penella de Silva accedió a develar ese capítulo: lo hizo en su departamento de Copacabana, Río de Janeiro, ante un redactor de Primera Plana; el fragmento inicial de sus declaraciones se inserta en "Historia del Peronismo", páginas 36/38.
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Esta semana falta la habitual columna sobre Economía del doctor Carlos García Martínez; y no sólo esta semana: su nombramiento como director del Banco Central de la República lo inhibe para seguir escribiendo en la prensa comercial argentina. García. Martínez se unió a la redacción de Primera Plana a partir del N9 147 (31/VIII/1965); desde entonces, esta revista ganó a uno de sus más lúcidos e inteligentes observadores. Hasta el martes próximo.
EL DIRECTOR.
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