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dibujo de Grondona White

Año VI Buenos Aires, 14 al 20 de noviembre de 1967 Nº 255
CARTA AL LECTOR
Hace cinco años, el martes 13 de noviembre de 1962, se abría en la Argentina una nueva era periodística: la era de las revistas semanales de noticias. Ese acontecimiento -que iba a revolucionar uno de los mercados lectores más adultos y exigentes del mundo- coincidió con la aparición del número uno de Primera Plana; y, también, con la avidez de un público deseoso de informaciones certeras e incisivas, despojadas de falsa solemnidad o sensiblera demagogia, al margen de ideologías y credos.
Que el público ansiaba esta respuesta a sus inquietudes no sólo lo demuestra el hecho de que Primera Plana celebra su quinto aniversario, a la vanguardia siempre de las publicaciones de su género. Hay, por lo menos, otras tres evidencias: la docena de títulos que, durante el último lustro, se afiliaron —de distinto modo— al estilo y las fórmulas ejercidos desde nuestras columnas; el creciente apoyo publicitario, capaz de hallar su símbolo en esta edición 255; y la certidumbre de que el soplo renovador alcanzó, inclusive, las severas páginas de los grandes diarios.
Enumerar todo cuanto Primera Plana aportó al periodismo nacional, en ideas e iniciativas, sería pecado de soberbia. Más sensato parece recordar, en momento tan especial, sus bases de trabajo: una absoluta libertad de expresión. Primera Plana no ha recibido —no podría recibir nunca— la ayuda embozada de las arcas gubernamentales, ni depende de partidos políticos, grupos de presión, monopolios financieros. Sus fondos están a la vista: el producto de la venta de ejemplares y la contratación de avisos. Sus objetivos son conocidos y caben en tres palabras: servir al país.
No es fácil, pese a todo, perseverar en este camino. Es, en cambio, tarea fructífera, una maravillosa aventura de la comunicación contemporánea. Para nosotros comenzó con aquella tapa de John Kennedy, media década atrás; recorrer ese número uno depara recuerdos, sorpresas y reiteraciones: porque en su edición inaugural, Primera Plana anunciaba el nacimiento del "happening", el derrumbe de la monarquía yemenita, el fracaso de la Misión Peña que volvía de negociar ante el Club de París, la trascendencia del Concilio Ecuménico, la proximidad de una conspiración militar contra el Gobierno Guido. Uno de los artículos principales se preguntaba sobre la neurosis de los argentinos; hoy, porque siempre deseamos mirar adelante, ofrecemos los resultados de la investigación que mayor esfuerzo y tiempo demandó a nuestros redactores: trata sobre la Argentina del 2067, un año en que —confiamos— Primera Plana seguirá en la calle.
Hasta el martes próximo. EL DIRECTOR.

dibujo de Grondona White

 

 

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