Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 

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Año VI - Buenos Aires 23 al 29 de julio de 1968 - Nº 291
CARTA AL LECTOR
A fines de 1967, Antonin Novotny, dictador checoslovaco, clausuraba un periódico literario y obstruía las elecciones en la Unión de Escritores. Hubo una manifestación de estudiantes, apaleada por la Policía. En ese momento, alguien se levantó en el Comité Central y dijo que el Partido Comunista, si quería mantenerse en el Gobierno, debía cambiar de métodos. Ese mismo hombre, el tecnócrata eslovaco Alexandre Dubcek, de 46 años, se interpone hoy entre el movimiento comunista internacional y la soberanía de su patria. Hijo de un carpintero que había emigrado a los Estados Unidos —y que luego abominó de la "democracia capitalista"—, profesa la creencia en un "socialismo humano". El sábado pasado, mientras las agencias occidentales presagiaban la inminencia de una intervención militar soviética, Osiris Troiani concluía su informe sobre el desafío de Praga (páginas 25/27).
Con todo, las noticias checas fueron desalojadas, el viernes a la tarde, por una historia inusitada, digna de una opereta: la fuga a Chile del Ministro de Gobierno de Bolivía, Antonio Arguedas, a quien el Ejército y el Presidente —su amigo y protector— acusan de haber vendido o regalado a Fidel Castro un ejemplar del Diario de Ernesto Guevara Lynch (página 30). La actitud del Ejército, que devolvió las sospechas sobre la moralidad de sus oficiales, ejecutando una suerte de golpe de Estado, otorgaba mayor actualidad a las memorias del Che, un texto inofensivo que ha desatado en La Paz tanta agitación como, el año pasado, la presencia del guerrillero en las selvas del Oriente.
Primera Plana, que se adelantó a toda la prensa argentina al iniciar la publicación del Diario en su anterior entrega —inclusive los trece pasajes que no llegaron a manos de Castro—, prosigue ahora con la difusión del documento (páginas 35/64). Razones de carácter técnico han impedido nuestro propósito de completar hoy la edición del Diario; de ahí que la tercera y última parte aparezca en el número 292.
Hasta el martes próximo. EL DIRECTOR

 

 

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