Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

 


Eduardo Frei

Revista Primera Plana
Tapa Eduardo Frei

CARTA AL LECTOR
La culpa, en todo caso, es de los acontecimientos. Y, cuando se producen, el periodismo necesita correr hacia ellos, llegar lo más cerca posible. Por lo menos, el periodismo que intenta hacer PRIMERA PLANA, el que nunca quiere conformarse con la visión ajena, el que a veces ni siquiera se conforma con la propia, Cuando esos acontecimientos, como suele ocurrir, forman una cadena, se despeñan sin pausa uno tras otro, la redacción vive un continuo poblarse y despoblarse, penetra en un laberinto de despachos telegráficos, llamadas telefónicas, prisas y suspensos, que suelen extenderse a los minutos previos al cierre, ese límite en que la actualidad debe recibir un punto y aparte hasta la semana siguiente.
Con una nota de periodismo, precisamente, comenzó a compaginarse este número. Veintiséis profesores de la materia, pertenecientes a 24 universidades norteamericanas, trazaron hace poco en USA una lista de los 20 mejores diarios del mundo, que sólo incluyó dos órganos sudamericanos: La Prensa y La Nación, de Buenos Aires. Esa valoración se torna más consistente al advertir que fue compartida por nombres tan prestigiosos como Le Monde, de París, Die Welt, de Hamburgo, The Times, de Londres, el Times, de Nueva York.
Por el hecho de ser rivales La Prensa y La Nación, una exploración de sus intimidades agregaba al artículo (páginas 30-31), el sutil detalle de las leyes de la competencia. Por el hecho de ser casi centenarios, era atractivo contemplar cómo estos dos pilares del periodismo argentino se ajustan al ritmo vertiginoso de la época.
La edición continuó creciendo cuando un redactor voló a Bariloche para captar los poco divulgados avatares de los Juegos de la Nieve. Ese redactor halló, en el trasfondo de las competencias deportivas, en las fiestas y en los pequeños incidentes, aspectos insólitos del turismo y de la vida en el Sur (ver páginas 22 a 25).
Detrás de él, otro hombre partió hacia el Sur, al atolladero político de la provincia de Santa Cruz (páginas 6 a 8), y fue testigo allí del fin de un episodio inusitado, que jalonó los últimos siete días de la vida nacional: el aterrizaje en las Malvinas del piloto Miguel Fitzgerald (páginas 8 y 9). Lejos de Río Gallegos, un tercer redactor de PRIMERA PLANA descendía en París, como primera etapa de una gira europea de veinte días. Y, en Buenos Aires, otros dos integrantes de la revista aprestaban sus documentos para salir rumbo a Japón y a varios países de América del Sur.
* * *
LA PORTADA: El enviado especial Osiris Troiani investigó durante una semana—a partir del día de las elecciones— las perspectivas que abre a Chile la victoria de Eduardo Frei y la democracia cristiana.
El candidato demócrata a la vice-presidencia de USA, Hubert Humphrey, en un artículo que acaba de publicar Foreign Affairs, menciona el hecho desconcertante, para una opinión pragmática como la norteamericana, de que son, por el contrario, fuerzas ideológicas las que cautivan a los pueblos iberoamericanos y ascienden al poder, de esas fuerzas, añade, las más activas son la democracia cristiana y el comunismo.
Con Frei en Chile, suena la hora de una generación de universitarios católicos de izquierda, lectores de Jacques Maritain y Emmanuel Mounier, que lucharon contra la dictadura de Ibáñez, votaron por el Frente Popular (encabezado por el masón Pedro Aguirre Cerda), enfrentaron (más o menos aliados con el comunismo) a Gabriel González Videla y otra vez a Carlos Ibáñez; y, finalmente, si aparecieron ante sus compatriotas como última línea de defensa antes del comunismo, con el lema de "Revolución en libertad", fue porque compitieron con la extrema izquierda en una oposición implacable al gobierno conservador de Jorge Alessandri.
La historia de ese grupo de activistas —y de su jefe, Eduardo Frei— se transcribe en las páginas 16 y 17.
Hasta el martes próximo.
EL DIRECTOR
15 de setiembre de 1964
DIRECTOR - EDITOR VICTORIO I. S. DALLE NOGARE

 

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