No hay cosa más inútil que dar consejos

Repuestas a preguntas del siglo pasado

A Juanita.—Agradezco sinceramente la buena intención que tienes en darme datos, que, según dices, serían preciosos para mí, pero me parece que no soy yo a quien se refiere tu amiguita, puesto que mi galán no tiene ojos azules, sino "celestes muy claros". Si la casualidad hiciera que tú lo conocieras, ¿quieres decirme cómo es físicamente? Si me contestas, que espero lo harás, (puesto que te adivino de un corazón bondadoso), y tu descripción coincide con la de él, te daré de muy grado los datos de mi persona que me has pedido.—Una Estudiosa.

A Golondrina triste.— ¡Oh! ¿Y tú lo sigues queriendo, sabiendo que está casado ? El fin que te espera es ser la más infeliz de las esposas. Ten presente que si se divorcia de la primera, nada le costará hacerlo de la segunda. Debes hacer un esfuerzo sobrehumano y olvidarlo cuanto antes; para alejarte, empieza por ver su mala conducta al declararse a una señorita estando él casado. Mucho cuidado te recomienda:—Canta Claro.

A Dea.—Lo mejor que puedo indicarte para el dolor de cabeza es que desistas de aprender el Esperanto. — Clamor.

A Violeta triste.—Siempre que, cómo tú dices, el joven te sigue por todas partes, es señal que está próximo a su arrepentimiento, y si tú tienes interés por él, demuéstraselo de manera que se anime a hablarte, y así quedará todo arreglado.— Clamor.

A Muschinga.—Me extraña, Muschinga, que siendo tan picarona no hayas descubierto que esos dolorcitos provienen de los nervios.—Mignonne.

A Patty.—A tu edad—12 años—no se preguntan cosas de esa índole; eres todavía demasiado niña para pensar en blanquearte y colorearte. Esa precocidad resérvala para estudiar, que, según tu escrito, un poquito de falta te hace. Dale tiempo al tiempo, y, en vez de escribir tonterías, cuando no tengas nada que hacer juega con las demás niñas de tu edad, que será mucho mejor. Si no te parece agradable la respuesta, pídele opinión a tu mamá, que con seguridad te dará un consejo parecido al mío. — Musmé.

A Azucena.—Si tú quieres llegar a conquistar a tu joven admirador, trata de encontrarte con él en alguna reunión, donde tiene más probabilidades de desembarazarse de su timidez.—Clamor.

A Lotus.—a) El procedimiento más simple para teñir el tejido de algodón es el de lavarlo con agua tibia, en la que se hayan echado unos granos de anilina negra, b) Cuando en las visitas se nos obsequia, sólo podemos rehusar por algún impedimento físico; de lo contrario, podremos rechazar por una sola vez, pues si lo hiciéramos varias
veces, daríamos lugar a dudas y resentimientos por parte de los obsequiantes, c) los dueños de casa tomarán después que las visitas se han servido. — Clamor.

A Golondrina triste.—He leído tu consulta, y me apresuro a contestarte: No temas que la esposa se oponga a vuestro enlace; en Montevideo se le concederá el divorcio que él pide con justa razón, y podrá casarse contigo sin que nadie pueda hacer reclamos. No dudo por un momento que serás feliz; el que en su primer matrimonio no haya tenido suerte tu novio, no implica el que no sea bueno, como opinarán algunos... ¡porque se hacen tantos matrimonios disparatados, no sólo en perjuicio de la mujer sino del hombre también! ¡Y hay tantos malos momentos en la vida!— Partidaria del divorcio.

NOVEDOSO DEPOSITO PARA GUARDAR HILO DE ATAR

Un coco, un pedazo de badana o imprimé de vistosos colores, dos pequeños aros de bronce y una bola de hilo de atar son los únicos elementos que se necesitan para construir un interesante y a la vez útil objeto decorativo para la cocina, la despensa o la habitación de trabajo. Se alisa un lado del coco — abierto en su parte superior donde está cubierto por la tela — se le pintan los ojos, la nariz y la boca, se le hace una perforación en el centro de los labios, y listo. Atornillando el coco a la pared, a un mostrador, etc., se tiene el hilo a mano y sin peligro de que se enrede.

APARATO IMPROVISADO PARA EXPRIMIR NARANJAS O LIMONES

He aquí un aparatito que puede improvisarse en un momento y que conviene recordar para la próxima vez que se va de pic-nic y se desea exprimir naranjas para refresco. Tómese una tablita cualquiera, córtese más o menos como muestra el grabado y clávese en ella cuatro clavos de 2" cuyas puntas, cuando se proyectan por el lado opuesto, se curvarán hacia adentro. Con este dispositivo se podrán exprimir las naranjas y los limones con la misma rapidez y eficiencia que utilizando bandejitas de vidrio que se venden especialmente para este objeto .

DIVISION EXACTA DE UN CIRCULO PEQUEÑO
Cuando se trata de trazar con minuciosa exactitud las divisiones en el interior de un círculo pequeño, resulta a veces difícil obtener los resultados satisfactorios que se persiguen con la simple ayuda de un compás de división. El inconveniente puede obviarse trazando otro círculo lo más grande que se pueda, concéntrico con el círculo pequeño. Luego divídase el círculo grande en el número requerido de partes iguales y trácense líneas al centro con una regla. Esto dividirá al circulo pequeño en el mismo número de partes iguales que el grande. Es mucho más fácil trabajar en una escala amplia, y cualquier error al hacer las divisiones grandes serán muy reducidas en la figura pequeña, aunque naturalmente las proporciones quedarán inalterables.

PARA SUBRAYAR LINEAS DE TEXTO EN UNA MAQUINA DE ESCRIBIR

Sosteniendo la pluma de una lapicera de depósito sobre una parte fija de una máquina de escribir, en tanto se hace deslizar el carro como indica la fotografía, se pueden subrayar rápidamente diversas líneas del texto de un escrito sin necesidad de sacar el papel de la máquina y sin usar regla. Esto representa una apreciable economía de tiempo, pues si bien todas las máquinas de escribir tienen una tecla para subrayar, sólo se avanza un espacio de letra por cada golpe de le mencionada tecla. Otra ventaja es que puede usarse tintas de varios colores si así se desea.

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