Si B.A.Rock fue capaz de concitar esa unión desinteresada en los músicos, la interacción que produjo en "él público fue conmovedora: los millones de dedos en "v", las rondas de baile con teas encendidas, los cánticos espontáneos, las danzas bajo los chorros de agua, el estremecedor minuto de silencio.
Todo fue una fiesta, en el escenario y en el campo. Pero sin embargo, eso no debe llevar a pensar que B.A.Rock, o lo que produce, es un ejemplo de virtuosismo. Ese .festival es lo que en realidad es el rock: apenas una ayuda para activar la sensibilidad sobre todo el horizonte de la vida. Una vida con más alegría, con más paz y con mayor interés artístico.
Pero el rock, y aun el festival, no servirá jamás para ocultar todas nuestras propias contradicciones, a lo sumo es un espejo para vernos. Ojalá nos hayamos visto todos, los unos a los otros. Las reflexiones que produzca será el mejor producto de B.A, Rock. Y eso comienza ahora.

ANÉCDOTAS

CHEQUEO
• Una vez concluida la actuación del ex bajista de Manal Alejandro Medina, el guitarrista del grupo, Beto Fortunato, se mezcló con el público y preguntó a cuanto conocido se le cruzó cómo había sonado la banda. Mis tranquilo por las buenas opiniones recogidas, Fortunato retomó al patio ubicado junto al escenario para preparar la gran zapada final.
ANTOLOGICO
• Un músico que dejó con la boca abierta a todos, por su impresionante dominio del instrumento, fue el guitarrista de DEMO Ricardo Mollo. Sus solos fueron realmente de antología y cuando en un momento dado levantó su guitarra y comenzó a tocar con la boca al estilo Hendrix, la multitud pareció estallar. Lo mismo ocurrió durante la zapada final, cuando parecía estar a punto de caer sobre la gente al constorsionarse en el borde del tablado.
PELÍCULA
• Una febril actividad desplegó el director Héctor Olivera junto a su grupo de asistentes. Además de seguir la actividad que se desarrollaba sobre el escenario, los encargados de la filmación del evento realizaron varias entrevistas a espectadores para conocer su opinión sobre el festival y sobre el rock en general.
DUALIDAD
• Una curiosa situación se planteó con la banda Montesano. El público los rechazó apenas subieron al escenario. El grupo hizo caso omiso a las muestras de desaprobación y comenzó a tocar en un clima de evidente tensión. A medida que fue transcurriendo el show, la opinión del público pareció cambiar y así fue como se escucharon los primeros aplausos. Lo curioso fue cuando tocaron un viejo tema de Crucis: mientras algunos bailaban, otros silbaban. Esa fue la señal evidente de que Montesano había conquistado a la mitad de la gente.

MASCOTA
• Momentos antes de que subiera a escena Tantor, por los altavoces del estadio fue anunciada la presencia de una singular "mascota". Así fue como, ante la atónita mirada de los espectadores, un enorme elefante ingresó al estadio y recorrió el predio. Lo que tal vez muchos ignoren es que desde hace un tiempo atrás, el elefante acompaña al grupo a algunos de sus shows. Por supuesto, el cachet del paquidermo se paga aparte...
REGALO
• El último tema interpretado por Demo fue un regalo para los nostálgicos. Rinaldo Rafanelli dijo que "habitualmente, éste tema no lo hacemos, pero como pensamos que la ocasión es propicia, vamos a tocar un rock de un gigante que ya no existe más: "Polifemo", y el grupo arrancó -tras un solo de batería- con "Qué hago yo aquí", lado B de aquel viejo éxito titulado "Suéltate. rock'n'roll".
TEMITAS
• "Qué hago yo aquí", tocado por Demo el tercer sábado, no fue el único tema que sacudió sus telarañas para brillar en el sol de B.A.Rock. En otros momentos, e interpretado por distintas agrupaciones, volvieron a ver la luz temas como "Despiértate nena" (Pescado Rabioso), "Copado por el diablo" (David Lebón), "Rutas argentinas" (Almendra), "Rock de la mujer podrida" (Los Gatos), "Suéltate rock'n'roll" (Polifemo), "Sacúdeme la vida" j(Manal), "Hurricane Smith" (Bob Dylan), y hasta una versión del legendario "Twist y gritos" de los Beatles, interpretado por Ibis Rojo, grupo santafesino formado por algunos ex miembros de Agnus.
ZAPADA
• La zapada con que concluyó el programa del tercer sábado fue anunciada al público momentos antes de que subiera a escena el anteúltimo grupo de ese día: Lerner y La Magia. La gente recibió con muestras de aprobación el anuncio y escuchó con atención el nombre de los protagonistas. En tanto, tras el escenario, los organizadores coordinaban con. los músicos los últimos detalles. Ahí se acordó que tocarían Héctor Starc, Ricardo Mollo, Beto Fortunato (guitarras), Rinaldo Rafanelli (bajo). Lucio Mazaira (batería), Babú Cerviño (teclados), Luis Millán (armónica) y Claudia. Puyó (voz). Sin embargo, Millán (asiduo colaborador de Miguel Cantilo) no subió junto al resto del grupo. La idea original era tocar un rock'n'roll cuadrado, pero esto también se cambió sobre la marcha, optándose por un blues.que derivó hacia un rock pesado.

OPINIONES

Dulces 16

Gustavo Pérez: (Dulces 16) "Me pareció todo muy lindo. Nosotros tuvimos algunos problemas con el monitoreo, pero igualmente creo que salió bien. En un momento dado le dije a la gente que no se matara y por suerte me entendieron y se quedaron tranquilos, bailando y cantando, pero sin cometer excesos. Nosotros tuvimos la suerte de tocar en un día de sol muy lindo, por lo que creo que hasta el tiempo se adhirió a la fiesta"
Juan Carlos Mangialavore:(Rayo X) "Pienso que hubo buena onda con la gente y eso es fundamental. El público vino predispuesto a escuchar con atención a todos los grupos. A nosotros nos recibieron muy bien y lo único que lamento es que se me haya roto una cuerda justo en el solo de uno de los temas más fuertes. Con respecto a la organización, yo la definiría como perfecta. A mi me gustaría dedicarle nuestra actuación y todo nuestro agradecimiento al publico de Pappo que tan bien se portó con nosotros".

SIN NUEVAS PROPUESTAS

La cuarta edición de los festivales de B.A.Rock sirvió para desnudar crudamente la falta de nuevas y originales propuestas musicales. Algunos músicos se quejaron, durante el desarrollo del evento, de una respuesta indiferente o poco predispuesta a la atención por parte del público, pero fue notoria la ausencia de propuestas renovadoras, aún en los nuevos grupos, que realmente conmovieran a la gente. Por eso es que muchos optaron simplemente por tomar sol, relajarse sobre el pasto, y motorizar la expresión física cuando lo creyeron necesario, no cuando los músicos lo propusieron.
Luego de una primera fecha que despertó dudas respecto de la eficacia de la infraestructura, los problemas fueron superados con prontitud y la organización demostró que no sólo quiso sino que también pudo y mucho. En ese aspecto, los organizadores cumplieron sobradamente con su parte, y ni siguiera hubo disturbios o atisbos de represión, para desgracia de cierta prensa. La gente disfrutó en paz de los estupendos y asoleados días que dieron marco digno a un evento cuyo símbolo es el sol. Pero esa sensación de tedio, de molicie merece un análisis más profundo.
En B.A.Rock quedó claramente evidenciada la apatía de una audiencia que en ningún momento pudo ser levantada intelectual o físicamente por la música, excepto ciertas expresiones a las que ese mismo público le brindó su apoyo. Pero las motivaciones fueron otras. Evidentemente, Pedro y Pablo, Piero y Cantilo y Punch sacaron al público de su letargo a través de apelaciones de tipo contestatario, las que recibieron la inmediata y unánime adhesión de la audiencia. Por otro lado, estuvieron los grupos que recibieron una adhesión física, la manifestación corporal producida por el deseo de exteriorizar energía fue siempre superior al ritmo que fluyó del escenario. Los Orions, Dulces 16, y Soulé lograron una respuesta que evidentemente fue más allá de lo que ellos mostraron. No significa que sus músicas carezcan de calidad, pero están muy lejos de sorprender a nadie. Las causas de esta manifiesta esterilidad por la que atraviesa la música nacional necesitarían un sesudo análisis que no es el fin de está nota. Simplemente, es un toque de atención ante una situación que más tarde o más temprano terminará por conspirar contra la salud del movimiento de rock argentino.