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Petty Guelache
recorrió los últimos diez años del rock en la Argentina, y en todo ese tiempo evitó
mezclarse con el profesionalismo. Su trayectoria, que cuenta en esta nota, es en esencia
la historia de los entretelones que rodearon a la música popular nacional. Desde la
tendencia acústica, en la que se enroló con Raúl Porchetto en 1970 (en "El
Acusticazo" tocaron juntos), hasta los grupos Superelástico y Ultraespacial, que
fueron contemporáneos de Madre Atómica, Guelache conservó su lugar dentro de las
corrientes en las que la investigación musical es lo primordial.
Guelache: "Antes de 'El
Acusticazo', y de conocer a Raúl estuve en Villa Gesell cuando era un centro musical.
Tocaba en café-concerts y cantaba mis temas. Cuando vine a Buenos Aires en el '70-71, me
encontré con Porchetto e hicimos algunas cosas juntos, a la vez que yo componía mis
temas como solista. Comencé a necesitar algo más violento, más pesado. Formé con
Alfredo Pusino, que ya no toca más, y "Grillo", el hermano de Gabriela, una
banda que se llamó Superelástico, y era algo raro. Fue la época en que quería combinar
la música clásica con rock. Eso duró cuatro o cinco meses. Con Alfredo, un baterista
que ahora dejó la música, y Eduardo (que estuvo en la Banda del Paraíso), formamos
Ultraespacial, grupo con el que tocamos más de un año. Con Ultraespacial tocábamos una
obra, "Dimensión", dividida en dos partes. Nos metimos a hacer algo que nos
sobrepasó: pretendíamos hacer lo que quiere hacer MIA ahora, pero teníamos que hacer
todo nosotros. Creo que Ultraespacial y Madre Atómica eran los dos grupos que, en esa
época, estaban en boca de todos."
Príncipe mágico y violeta
Para mantener su independencia de
criterio, Guelache dejó la música por un tiempo hasta que Orion's Beethoven decidió
reconstituirse. A eso le siguió Bubu, que surgió después de que Guelache rechazó el
ofrecimiento para ingresar a Expreso Zambomba. A partir de entonces, se dedicó a
reconstruir Bubu, en lo que fracasó, y a continuar con la integración y estabilización
de su proyecto, provisoriamente denominado Príncipe Mágico.
Guelache: "Después de
Ultraespacial quedé muy mal. Se nos daban todas en contra. Habíamos conseguido una
persona que nos banco una grabación y nos compró equipos nuevos, porque le había
gustado mucho lo que hacíamos y él disponía de una herencia. Pero, al fin y al cabo, se
cortó todo porque no había pasta para hacer la grabación. Tanta fue nuestra desilusión
que los chicos que tocaban el bajo y la batería decidieron no tocar nunca más. Luego de
eso, estuve dos años enclaustrado, dedicado a tocar para amigos, estudiar y componer. Los
chicos de Orion's Beethoven me buscaron para grabar un disco y me pareció que eso era
bueno para divertirse, ya que mi música nunca había tenido nada que ver con la de ellos.
Cuando pasó el apuro de la grabación que tenían que hacer ("Superangel"),
quise aportar mis letras y mis temas, y ahí no ligamos para nada. Ellos tiraban para un
lado y yo para el mío. No me molestó hacer eso, porque me divertí, no me significó
esfuerzo. Continué buscando músicos para hacer un grupo propio, y nunca podía
completarlo. |

Eso se iba a llamar
Príncipe Violeta. Por esa época, en la misma semana, me llamaron las chicos de Expreso
Zambomba y Bubu. Los Zambomba se tocaban todo, pero era una onda de jazz-rock a mil por
hora que a mi no me copa; las cosas sin matices no me atraen. Zambomba parecía un
concurso de virtuosismo para ver quién tocaba más rápido. Además, la onda era no
aportar nada: me decían todo lo que tenia que hacer. Eso lo puedo hacer, pero con una
cosa que me cope, como después ocurrió con Bubu. Ya antes de que me llamaran, los había
escuchado y me gustaba lo que hacían. Mi participación era un poco provisoria, para
terminar de grabar 'Anabelas' y poder enterrarla. Más adelante se vería lo que
sucedería. Y sucedió que cada uno tiraba para su lado y se terminó todo, además de que
la grabadora no nos prestó nada de atención."
Un tema espinoso
El proyecto denominado Príncipe
Mágico se sigue dilatando por la imposibilidad de dar continuidad al grupo.
Simultáneamente, Guelache experimenta con Aldo Altayrac, quien fabricó un bandoneón
eléctrico. Además, un grupo nuevo trataba de ponerse en comunicación con él para
realizar unas grabaciones.
Guelache: "Tengo material
compuesto desde hace tres años que realmente me gusta; quisiera tocarlo con Príncipe.
Nunca acepté y jamás aceptaría ser un músico de sesiones. Es un tema bastante
espinoso. Toda la vida traté de hacer las cosas de corazón, sintiéndolas. Una vez me
ofrecieron grabar un álbum en inglés con temas 'disco', había mucho dinero detrás de
todo eso; pero, de haberlo hecho, me sentiría como un payaso. Básicamente, me siento
guitarrista, aunque tanto en Orion's Beethoven como en Bubu hice las veces de cantante
porque todo estaba armado y había que trabajar rápido. Aunque me vinculan con el canto,
primordialmente soy guitarrista y compositor. Como compositor pasé por todas las etapas,
desde el folk hasta el jazz y lo que hago ahora, que es como una mezcla de todo. Mi
obsesión es la búsqueda de originalidad. Y pasé por periodos en que no quería escuchar
nada para no influirme. En este momento, mi música es experimental, y me siento
convencido de lo que compongo." |