Tina Turner
La reina ácida está de vuelta
Entre las muchas sorpresas que deparó 1984 se cuenta una muy especial: el regreso de la talentosa Tina Turner a la escena musical. En efecto, tras vivir un período particularmente difícil, la famosa cantante acaba de lanzar su primer álbum en varios años. Y "Bailarina particular" es la mejor prueba de que el fuego mítico que hizo de Tina una estrella única en su tipo aún está vivo.
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Si existe una historia digna de ser llevada al
cine y convertirse en un éxito resonante, esa
es la historia de Tina Turner. A la edad de
cuarenta y tres años, la cantante es una
auténtica leyenda viviente del rock y, como
las heroínas de las películas ha conocido la
fama, la riqueza, el infortunio y el dolor en
idénticas proporciones. Tina (o Annie-Mae
Bullock) tuvo una infancia de trabajo y
pobreza; en la adolescencia despertó
abruptamente a la fama y vivió una existencia
digna de una diva de los años '30. Pero más
tarde vio su vida transformarse paulatinamente
en un infierno y cayó bajo el peso del
infortunio. Cuando todos creyeron que ya nunca
más se podría levantar, la cantante siguió
luchando con la misma garra y la misma energía
puestas en la música y logró finalmente volver
a encauzar su vida. Actualmente, tras ocho
años de conflictos, presiones y penurias, Tina
Turner vive de nuevo el éxito.
LIMITES DE LA CIUDAD DE NUTBUSH
Nacida en Nutbush, Tenesse, Tina Turner vivió una infancia idéntica a la de cualquier niñita negra de su edad en un estado sureño.
Tina Turner: "Nutbush era un lugar espantoso y aún sigue siéndolo. Hay allí solamente un par de tiendas, un bar, una iglesia y un prostíbulo donde sólo se permite el ingreso a los blancos. Los blancos tienen las tierras y las casas, los negros trabajan los campos y limpian las casas. Mi padre era capataz de un campo de algodón. Yo misma trabajaba en la cosecha bajo su mando. Recolectábamos algodón y lo volcábamos, sobre unos lienzos enormes. Papá le rendía cuentas al patrón de nuestro trabajo y si no lo habíamos hecho bien había problemas".
Dueña de natural talento, Tina comenzó .a cantar siendo aún muy pequeña.
TT: "Tenía siete u ocho años y en Tenesse vivía un hombre llamado Bootsie Whitelow. Tenía una banda y tocaba el trombón. Venía a Nutbush para los pic-nics del Día del Trabajo y del Día de Acción de Gracias y yo me pasaba esos días cantando, saltando y bailando a su alrededor. Después iba a casa, me recogía el pelo y me ponía delante del espejo simulando cantar y tocar el piano".
Ya en la adolescencia, Tina decidió dedicarse por completo a la música y se mudó a la ciudad de Saint Louis donde comenzó a cantar en un club nocturno. Tenía diecisiete años cuando conoció a Ike Turner, líder de la banda local más importante. Pocos meses más tarde se casaron y en un par de años se convirtieron en el grupo soul más importante de los Estados Unidos. Tina se distinguió siempre de sus pares por el hecho de no cantar meramente un tema sino de interpretarlo con cada poro de su piel, cada centímetro de su cuerpo, por hacerlo palpitar en el corazón de cada uno de sus oyentes y por embrujar a cuanta audiencia la conoció.
Según afirma Tina Turner, su peculiar carisma se debe a sus antecedentes familiares y
a la mezcla de sangres que corre por sus venas.
TT: "Mi abuela paterna era negra y pertenecía a la iglesia bautista. Era muy devota y cantaba en los servicios dominicales. Mi abuela materna en cambio era india y mantenía vivas todas las creencias de su raza además de cultivar su música".
Respecto de su encuentro con Ike Turner, la cantante conserva un grato recuerdo aún cuando su vida junto al talentoso músico fue por demás tormentosa.
TT: "Era una chica cuando comencé a frecuentar los clubes. No podía decir mi verdadera edad porque sino me echaban. Me vestía como una mujer mucho mayor e iba acompañada por mi hermana que también cantaba. Cuando conocimos a Ike nos volvimos locas por él. Queríamos estar con esa banda a cualquier precio y hacíamos todo lo posible para llamar su atención. Finalmente, mi hermana comenzó a salir con uno de sus músicos y Ike se fijó en mí. Cuando me oyó cantar -era un blues de B.B.King- se volvió loco y me llevó con él. Nos casamos pocos meses más tarde".
PORTALIGAS ROJO
Si hay algo que Tina Turner ha tenido muy en claro es que ella no es ni Aretha Franklin ni Diana Ross. Su peculiar estilo impresionó a Phil Spector, el famoso productor británico, responsable de su mayor éxito musical: "Río profundo, montaña alta".
TT: "Yo tenía una idea muy equivocada de los ingleses. Pensaba que eran gente muy seca, muy dura, gente sin alma pero no porque fueran malos sino porque tenían todo lo que necesitaban y no había en sus vidas motivos para sufrir o vivir grandes pasiones. Por eso pensaba que eran muy huecos, como si estuvieran hechos de madera.
El éxito que alcanzamos con Ike en Inglaterra me dejó completamente descolocada".
En efecto, Tina Turner logró acceder mucho más rápidamente al éxito masivo en Inglaterra que en los Estados Unidos donde sus colegas famosas siempre fueron un serio obstáculo debido a que caían más simpáticas que ella a la audiencia blanca. La aventura británica del dúo hizo que Mick Jagger se interesara en ellos y en 1969 los invitara a ser el acto de apertura
TT: "Aquello fue algo increíble. Yo nunca había cantado ante tanta gente y tan joven. Los muchachos se acercaban al escenario, miraban bajo mi pollera y gritaban "¡Eh! ¡Miren! ¡Su portaligas es rojo!'".
Esa gira fue el preludio de un vertiginoso ascenso y durante los siete años siguientes pareció que nada ni nadie podría opacar el brillo de la estrella de Tina. Nadie ... sino Ike Turner. En efecto, la pareja tenía serias diferencias que se agravaron cuando Ike comenzó a golpear regularmente a su esposa. Una noche, a mediados de 1975, Tina decidió dejarlo. Esperó que Ike se durmiera y huyó del hogar de Dallas donde estaban alojados. Se llevó consigo tan solo treinta y cinco centavos de dólar, su tarjeta de crédito para comprar nafta y la ropa que llevaba puesta. Estaba seriamente herida y consiguió que por caridad la alojaran en un motel de tercera. Desde allí llamó a su mejor amiga, la actriz Anne Margret, quien le hizo llegar un pasaje de avión hasta la ciudad de Los Ángeles y la escondió en su casa durante seis meses. Ike Turner la buscó por todo el país sin poder hallarla. Tina reveló su paradero sólo cuando le fueron dadas todas las seguridades respecto del divorcio.
UNA BAILARINA PARTICULAR
Los trámites concluyeron un año más tarde. Cuando la sentencia fue dictada, Tina
firmó un documento renunciando a todo derecho sobre los bienes acumulados por el dúo durante los quince años que duró su asociación musical. Libre de Ike, Tina descubrió que estaba en serios problemas: su huida había provocado la cancelación de una gira muy importante y los promotores la demandaron por una cifra varias veces millonada. Desposeída de su patrimonio personal, sin un contrato discográfico ni un disco en el mercado, Tina estaba imposibilitada de pagar sus deudas. Durante los siguientes seis años trabajó exclusivamente para cancelarlas. Cantó en bares, clubes, fiestas particulares, boites, teatros y en cualquier lugar que le ofrecieran. Durante una temporada trabajó en Inglaterra haciendo dos shows por noche, seis días a la semana. Prácticamente no tuvo descanso hasta que finalmente quedó en libertad. Y cuando ese momento llegó, la cantante decidió que su carrera no iba a limitarse simplemente a eso. Quería volver a ser la estrella que había sido y lo iba a lograr.
Primero fue el lanzamiento de su simple "Let's Stay Together", una re-make del clásico de Al Green grabado junto al grupo Heaven 17. Luego fue un segundo simple conteniendo una nueva versión del famoso tema de David Bowie "1984". Por primera vez en muchos años, Tina Turner volvía al mercado discográfico y su regreso no defraudaba a nadie. Finalmente, llegó la edición de "Bailarina particular" que no sólo incluía los temas antes mencionados sino uno de Lennon y Mc Cartney ("Socorro") y otro de Mark Knopfler ("Bailarina particular"). El éxito fue instantáneo y Tina filmó para la pasada Navidad un espectacular televisivo para el canal 4 de Inglaterra. Al término de la grabación, la
cantante recibió el mejor homenaje: un cerrado aplauso de los músicos, cameramans, técnicos y asistentes que se encontraban en el estudio.
La estrella de Tina vuelve a brillar pero su luz es ahora como un fuego tranquilo. La cantante se muestra serena y reflexiva y asegura no guardar rencores a quienes fueron crueles con ella.
TT: "El mundo es muy duro y a menudo la gente que se vuelve en contra de uno no lo hace porque le tenga fastidio sino porque se ve tan presionado por otros que necesita encontrar una salida. No se puede luchar contra todo, dominar todo ni pretender todo. Hay que limitarse a vivir, Eso sólo ya es bastante trabajo".
Tina pronto volverá a cantar en público. Pero ahora no lo hará acuciada por sus deudas y en bares de tercera. Lo hará en los grandes escenarios que conocieron su esplendor y ante las audiencias que la ovacionaron diez años atrás. Respecto del futuro, Tina tiene grandes expectativas y la misma filosofía que alimentó al comienzo de su carrera: "Yo simplemente tomo una canción y se la doy a la gente de modo tal que ellos puedan sentirla. A veces lo logro y a veces no. Pero aún en esos casos, ellos saben que lo estoy intentando".
Alex Glaser
Revista Pelo
08/1984
LIMITES DE LA CIUDAD DE NUTBUSH
Nacida en Nutbush, Tenesse, Tina Turner vivió una infancia idéntica a la de cualquier niñita negra de su edad en un estado sureño.
Tina Turner: "Nutbush era un lugar espantoso y aún sigue siéndolo. Hay allí solamente un par de tiendas, un bar, una iglesia y un prostíbulo donde sólo se permite el ingreso a los blancos. Los blancos tienen las tierras y las casas, los negros trabajan los campos y limpian las casas. Mi padre era capataz de un campo de algodón. Yo misma trabajaba en la cosecha bajo su mando. Recolectábamos algodón y lo volcábamos, sobre unos lienzos enormes. Papá le rendía cuentas al patrón de nuestro trabajo y si no lo habíamos hecho bien había problemas".
Dueña de natural talento, Tina comenzó .a cantar siendo aún muy pequeña.
TT: "Tenía siete u ocho años y en Tenesse vivía un hombre llamado Bootsie Whitelow. Tenía una banda y tocaba el trombón. Venía a Nutbush para los pic-nics del Día del Trabajo y del Día de Acción de Gracias y yo me pasaba esos días cantando, saltando y bailando a su alrededor. Después iba a casa, me recogía el pelo y me ponía delante del espejo simulando cantar y tocar el piano".
Ya en la adolescencia, Tina decidió dedicarse por completo a la música y se mudó a la ciudad de Saint Louis donde comenzó a cantar en un club nocturno. Tenía diecisiete años cuando conoció a Ike Turner, líder de la banda local más importante. Pocos meses más tarde se casaron y en un par de años se convirtieron en el grupo soul más importante de los Estados Unidos. Tina se distinguió siempre de sus pares por el hecho de no cantar meramente un tema sino de interpretarlo con cada poro de su piel, cada centímetro de su cuerpo, por hacerlo palpitar en el corazón de cada uno de sus oyentes y por embrujar a cuanta audiencia la conoció.
Según afirma Tina Turner, su peculiar carisma se debe a sus antecedentes familiares y
a la mezcla de sangres que corre por sus venas.
TT: "Mi abuela paterna era negra y pertenecía a la iglesia bautista. Era muy devota y cantaba en los servicios dominicales. Mi abuela materna en cambio era india y mantenía vivas todas las creencias de su raza además de cultivar su música".
Respecto de su encuentro con Ike Turner, la cantante conserva un grato recuerdo aún cuando su vida junto al talentoso músico fue por demás tormentosa.
TT: "Era una chica cuando comencé a frecuentar los clubes. No podía decir mi verdadera edad porque sino me echaban. Me vestía como una mujer mucho mayor e iba acompañada por mi hermana que también cantaba. Cuando conocimos a Ike nos volvimos locas por él. Queríamos estar con esa banda a cualquier precio y hacíamos todo lo posible para llamar su atención. Finalmente, mi hermana comenzó a salir con uno de sus músicos y Ike se fijó en mí. Cuando me oyó cantar -era un blues de B.B.King- se volvió loco y me llevó con él. Nos casamos pocos meses más tarde".
PORTALIGAS ROJO
Si hay algo que Tina Turner ha tenido muy en claro es que ella no es ni Aretha Franklin ni Diana Ross. Su peculiar estilo impresionó a Phil Spector, el famoso productor británico, responsable de su mayor éxito musical: "Río profundo, montaña alta".
TT: "Yo tenía una idea muy equivocada de los ingleses. Pensaba que eran gente muy seca, muy dura, gente sin alma pero no porque fueran malos sino porque tenían todo lo que necesitaban y no había en sus vidas motivos para sufrir o vivir grandes pasiones. Por eso pensaba que eran muy huecos, como si estuvieran hechos de madera.
El éxito que alcanzamos con Ike en Inglaterra me dejó completamente descolocada".
En efecto, Tina Turner logró acceder mucho más rápidamente al éxito masivo en Inglaterra que en los Estados Unidos donde sus colegas famosas siempre fueron un serio obstáculo debido a que caían más simpáticas que ella a la audiencia blanca. La aventura británica del dúo hizo que Mick Jagger se interesara en ellos y en 1969 los invitara a ser el acto de apertura
TT: "Aquello fue algo increíble. Yo nunca había cantado ante tanta gente y tan joven. Los muchachos se acercaban al escenario, miraban bajo mi pollera y gritaban "¡Eh! ¡Miren! ¡Su portaligas es rojo!'".
Esa gira fue el preludio de un vertiginoso ascenso y durante los siete años siguientes pareció que nada ni nadie podría opacar el brillo de la estrella de Tina. Nadie ... sino Ike Turner. En efecto, la pareja tenía serias diferencias que se agravaron cuando Ike comenzó a golpear regularmente a su esposa. Una noche, a mediados de 1975, Tina decidió dejarlo. Esperó que Ike se durmiera y huyó del hogar de Dallas donde estaban alojados. Se llevó consigo tan solo treinta y cinco centavos de dólar, su tarjeta de crédito para comprar nafta y la ropa que llevaba puesta. Estaba seriamente herida y consiguió que por caridad la alojaran en un motel de tercera. Desde allí llamó a su mejor amiga, la actriz Anne Margret, quien le hizo llegar un pasaje de avión hasta la ciudad de Los Ángeles y la escondió en su casa durante seis meses. Ike Turner la buscó por todo el país sin poder hallarla. Tina reveló su paradero sólo cuando le fueron dadas todas las seguridades respecto del divorcio.
UNA BAILARINA PARTICULAR
Los trámites concluyeron un año más tarde. Cuando la sentencia fue dictada, Tina
firmó un documento renunciando a todo derecho sobre los bienes acumulados por el dúo durante los quince años que duró su asociación musical. Libre de Ike, Tina descubrió que estaba en serios problemas: su huida había provocado la cancelación de una gira muy importante y los promotores la demandaron por una cifra varias veces millonada. Desposeída de su patrimonio personal, sin un contrato discográfico ni un disco en el mercado, Tina estaba imposibilitada de pagar sus deudas. Durante los siguientes seis años trabajó exclusivamente para cancelarlas. Cantó en bares, clubes, fiestas particulares, boites, teatros y en cualquier lugar que le ofrecieran. Durante una temporada trabajó en Inglaterra haciendo dos shows por noche, seis días a la semana. Prácticamente no tuvo descanso hasta que finalmente quedó en libertad. Y cuando ese momento llegó, la cantante decidió que su carrera no iba a limitarse simplemente a eso. Quería volver a ser la estrella que había sido y lo iba a lograr.
Primero fue el lanzamiento de su simple "Let's Stay Together", una re-make del clásico de Al Green grabado junto al grupo Heaven 17. Luego fue un segundo simple conteniendo una nueva versión del famoso tema de David Bowie "1984". Por primera vez en muchos años, Tina Turner volvía al mercado discográfico y su regreso no defraudaba a nadie. Finalmente, llegó la edición de "Bailarina particular" que no sólo incluía los temas antes mencionados sino uno de Lennon y Mc Cartney ("Socorro") y otro de Mark Knopfler ("Bailarina particular"). El éxito fue instantáneo y Tina filmó para la pasada Navidad un espectacular televisivo para el canal 4 de Inglaterra. Al término de la grabación, la
cantante recibió el mejor homenaje: un cerrado aplauso de los músicos, cameramans, técnicos y asistentes que se encontraban en el estudio.
La estrella de Tina vuelve a brillar pero su luz es ahora como un fuego tranquilo. La cantante se muestra serena y reflexiva y asegura no guardar rencores a quienes fueron crueles con ella.
TT: "El mundo es muy duro y a menudo la gente que se vuelve en contra de uno no lo hace porque le tenga fastidio sino porque se ve tan presionado por otros que necesita encontrar una salida. No se puede luchar contra todo, dominar todo ni pretender todo. Hay que limitarse a vivir, Eso sólo ya es bastante trabajo".
Tina pronto volverá a cantar en público. Pero ahora no lo hará acuciada por sus deudas y en bares de tercera. Lo hará en los grandes escenarios que conocieron su esplendor y ante las audiencias que la ovacionaron diez años atrás. Respecto del futuro, Tina tiene grandes expectativas y la misma filosofía que alimentó al comienzo de su carrera: "Yo simplemente tomo una canción y se la doy a la gente de modo tal que ellos puedan sentirla. A veces lo logro y a veces no. Pero aún en esos casos, ellos saben que lo estoy intentando".
Alex Glaser
Revista Pelo
08/1984
