ENTRE TANGO Y TANGO. — El tema que músico Horacio Salgán sobre la letra de Jesús Otero y canta Edmundo Rivero, rotuló la segunda presentación para el sello de ambos. Un renovado esfuerzo que reverdece las actuaciones conjuntas, durante los años del 40, del pianista-director y del cantante. Como no todos las recordarán, este reencuentro, a más de dos décadas de separación, constituye casi una novedad. El ex vocalista de Aníbal Troilo tiene ya una larga trayectoria solo que no puede disimular frente a los exclusivistas y originales hallazgos instrumentales de Salgán. Precisamente Entre tango y tango es el número que más sufre ante el desborde imaginativo del pianista: no ajusta con el grave lirismo de Rivero. No importa: quedan otros tangos —La luz de un fósforo, Bandoneón arrabalero, La casita de mis viejos, Lo han visto con otra— y el vals (aunque el disco y el sobre anuncien tango) Pedacito de cielo— que testimonian los beneficios del acople (Philips 5085581 estéreo).
Revista Siete Días Ilustrados
18.05.1970