El cierre urge y, por primera vez, esta página
se escribe antes de que la revista esté terminada. Todavía
están abiertas las páginas que en esta edición fueron
dedicadas al tema de la guerra Irán-Irak.
Hoy, martes de noche, se sigue trabajando en el primero y
segundo piso de
nuestra redacción. En el primero, a través de las máquinas
receptoras de las telefotos, Tito La Penna, el fotógrafo de
GENTE en el frente de guerra, consigue pasar las fotos que
se salvaron de la requisa que el ejército iraquí les hizo
apenas llegados a Bagdad. Allí, fotógrafo y periodista
perdieron varias decenas de rollos y después de tres horas
consiguieron recuperar sus máquinas y equipos, con la
advertencia de que no podían salir a la calle para tomar
fotografías a riesgo de ser encarcelados o blanco de las
armas.
En el tercer piso, mientras tanto, a través del DDI (el
teléfono de discado directo internacional), Manuel Caldeiro
trasmite su primer despacho, que comenzó con lágrimas y voz
ahogada: "Llegamos al hotel con dos bombas como música de
fondo. . . A pocos metros vi caer un avión iraní. . . No es
con vergüenza que les digo que las primeras horas en Bagdad
las pasamos abajo de la cama. . . Además, no tengo
precisiones de cómo va la guerra. Esta es una confesión
auténtica, en todo el trayecto la información es confusa, no
sé si estoy en el país que gana o en el que pierde la
guerra. . . Esta es la pura verdad. . ." Así, de esta
manera, se están sumando los elementos que componen nuestra
primera nota desde el frente de batalla.
Pero esta página el taller la está reclamando junto con la
tapa, que hace pocos minutos salió hacia la planta impresora
de Garin, para la que se esperaba el último despacho de
nuestros enviados.
Por eso aquí y ahora, el punto final.
Revista Gente y la Actualidad
2 de octubre de 1980
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