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Revista Siete Días Ilustrados 07.07.1969 EN ESTE NUMERO
Una ola de crudo terror y funestas agorerías se precipita sobre
Buenos Aires desde mediados de la última semana de junio; las
apariencias son nefastas y sumen a la opinión pública en el
desconcierto total. Los tres hitos más notables: el sincronizado
incendio de trece supermercados de la cadena Minimax (el jueves
26; ver número 112), la muerte a tiros —en el barrio del Once, el
viernes 27— de un ex dirigente comunista, Emilio Mariano Jáuregui,
y el asesinato del adalid sindical Augusto Timoteo Vandor (el
lunes 30; página 6), a manos de un comando que, con frialdad
profesional, consumó el mayor crimen político de las últimas
décadas. Exactamente media hora después del atentado, cuatro
redactores de SIETE DIAS se abocaron a desentrañar la más grave
incógnita, ¿quién mató a Vandor?, y otras subsidiarias de ésa:
¿cómo pudieron los asesinos doblegar la custodia personal del
líder metalúrgico, muerto en su sede gremial, prácticamente una
fortaleza?; ¿qué perspectivas se abren ahora para el movimiento
obrero?; ¿quién será el heredero del Lobo? Las crestas de la
inquietud crecieron todavía más, ese mismo día, cuando el gobierno
anunció la instalación del estado de sitio, medida extrema asumida
por primera vez desde junio de 1966. Simultáneamente con el
velatorio de Vandor (foto), las fuerzas de seguridad clausuraban
la CGT de Paseo Colón —inspiradora de una huelga, el 1º de julio,
que alcanzó una módica repercusión—, intervenían media docena de
gremios y detenían a unas trescientas personas en todo el país,
inclusive dirigentes gremiales y políticos de extracción
democrática. El terror —la más execrable manifestación de
protesta— se convirtió, en suma, en el signo de una quincena que
la mayoría de los argentinos querrán —¿podrán?— olvidar. • El
edificio, un rascacielos de Boston, Estados Unidos, congrega la
mayor suma de esfuerzos y conocimientos en favor de la
recuperación de niños enfermos. Se llama simplemente Hospital de
Niños de Boston y, a cien años de su fundación, es el más notable
instituto especializado del mundo, al que arriban no sólo
criaturas de cualquier latitud del orbe, sino legiones de médicos
extranjeros interesados en adquirir más y mejor experiencia. Entre
las páginas 40 y 45 se describe una visita al nosocomio, junto a
las opiniones de sus jefes más conspicuos. La nota fue adquirida
en exclusividad por SIETE DIAS con el propósito de ofrecer pautas
concretas de un trabajo digno de emulación. • "En el fondo, soy
una de las tantas criaturas de ese genio que es Ingmar Bergman".
Quien así opina es Liv Ullman, su cuarta mujer y una de las más
estupendas actrices contemporáneas, protagonista de Vergüenza,
film que se exhibe actualmente en Buenos Aires y que constituye
una de las altas cumbres bergmanianas. El juicio crítico de la
película se edita en la página 66; el reportaje a la Ullman, una
noruega de rostro ascético, a partir de la página 32. Tapa:
princesa árabe
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