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Primera Plana
DIRECTOR JACOBO TIMERMAN
CARTA AL LECTOR
ILLÍA: El rostro de éste médico rural aparece hoy por cuarta vez en la tapa de PRIMERA PLANA. La primera fue en el Nº 23, del 16 de abril de 1963, durante la campaña previa a las elecciones; la foto de entonces mostraba al doctor Illia con su compañero de fórmula, el doctor Carlos Perette. La segunda, en el Nº 36; la carátula se dedicó solamente a Illia con este título: "El ganador ¿será el presidente?" La tercera en el Nº 50, del 22 de octubre, a través de un dibujo del pintor Carlos Alonso, cuando el nuevo mandatario acababa de cumplir su inicial semana de gobierno. Ahora, el rostro de Illia vuelve a surgir, según una caricatura de Flax; y vuelve a surgir porque, quizá como nunca hasta este momento, Illia está en el centro de una vorágine económica y social. A menos de cinco meses de su instalación en la Casa de Gobierno y pasados los fervores del comienzo, la tradicional expectación que prologa y sigue a todo cambio de elenco presidencial, enfrenta una realidad tapizada de incertidumbre y lógicas presiones. Una realidad que se ha volcado de golpe sobre él y su gabinete y que responde, en definitiva, ya no a meros juegos de facciones o fuerzas, sino a un país que no puede detener su marcha. El primer invierno gubernamental de Arturo Illia —como se explica en las páginas 8 y 9— será un duro invierno.
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VILLAS MISERIA: Desde que comenzó 1964, ocho barrios de emergencia de la Capital y el Gran Buenos Aires fueron visitados por el fuego: 4.000 personas quedaron sin techo y hubo tres muertes. En las páginas 20 a 22 se transcriben los resultados de una encuesta que redactores de esta revista practicaron en los principales lugares incendiados. Se trataba de hurgar, en el contacto con docenas de pobladores de las villas miseria, no sólo una situación puramente sociológica, sino algo más curioso y menos conocido: cómo reaccionan esos pobladores al minuto siguiente del incendio, qué hacen, de qué manera reconstruyen su vida y sus bienes, quiénes los ayudan y quiénes los perturban. La investigación, en síntesis, señala que los habitantes de los barrios de emergencia, con la cooperación exterior o con sus propios magros medios, tornan a levantar sus viviendas, a clavar las chapas y las maderas. Dicho con otras palabras, tornan a invitar al fuego. Pero desde que se extinguen las llamas hasta que los nuevos ranchos asoman, se sucede un ignorado y acuciante sin fin de tramitaciones, ardides, decepciones, y esperanzas.
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EDUCACIÓN: Dentro de seis días se iniciará el año escolar, pero padres y maestros ya están haciendo cálculos. Los padres estiman cuánto les costará el curso lectivo de sus hijos; los maestros, cuál será el aumento definitivo que el gobierno practicará en sus sueldos. A fines de semana, el ministro de Educación les proponía un incremento cercano al 15 por ciento, y el ofrecimiento obligó a recapacitar a muchos docentes que insinuaban la necesidad de empezar las clases con una huelga. Los niños, destinatarios finales, eran los más serenos: para ellos, lo único que hay delante es otro año de guardapolvos blancos, libros y caras nuevas (páginas 36 y 37).
Hasta el próximo martes.
EL DIRECTOR
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